Pedro, capitán del Antela: “La retirada está cerca”

Por las venas del capitán Pedro Rodríguez Castro corre sangre blanquinegra, aunque se muestra sorprendido después de marcar un hat trick en la última victoria del Antela ante el Viana. “Nunca fui de anotar goles, sino más bien dar asistencias, pero ya sabes que dicen por ahí, que a veces entran casi sin querer. De los tres me quedó con el primero, porque fue recibir un balón entre los centrales, conseguí picársela al portero y de chilena, a portería vacía, lo conseguí, siendo la verdad muy bonito”.

El mediocampista antelano, que ya había marcado en la liga 21-22 ante el Santa Teresita, esa cantidad de goles en un mismo partido, cuenta los días para que el equipo certifique un nuevo título de liga y el regreso, un año más tarde, a la Preferente. “Creo que si ganamos los dos próximos encuentros ya estaría hecho, pero habrá que seguir remando hasta el final, aunque estoy convencido de que se puede certificar el ascenso. Ahora viene el partido aplazado ante el Loñoá y ya sabes que no se puede fiar de nadie, pero nosotros venimos de una buena racha con un 0-4 ante el Peroxa, un 5-0 frente al Córgomo y otro 0-5 en Viana, aunque eso no quiere decir nada”.

Sobre si hubo dudas tras aquellos tres empates seguidos, Pedro la atribuye a una mala racha donde “básicamente no nos quería entrar el balón, porque generábamos situaciones y atrás toda la temporada estuvimos bastante contundentes. Tal vez nos faltó un poco de puntería y siempre se siembra la duda, pero ahora nos están entrando”.

En el plano personal, está plasmando una gran campaña. “La verdad es que por dentro no me siento un chaval de 20, igual en el campo parece otra cosa. El año pasado me perdí unos cinco meses por una lesión, retomé bien y esta temporada era un poco la prueba de fuego a ver si el cuerpo aguantaba o no. La retirada está cerca, porque la Preferente es muy exigente y de los dos años que estuve jugué uno completo”.

El ahora máximo artillero del Antela, con 10 goles, cuenta desde siempre con el apoyo de su padre José María. “Tengo que hablar con el club porque están premiando a los jugadores, pero también deberían premiar al aficionado, no del mes sino del año, porque un apoyo así cualquiera lo desearía y es que hacer un desplazamiento larguísimo a Viana tiene su mérito y allí estuvo el domingo. A veces alucino y le digo si no tiene otra cosa que hacer, pero él no falla un día y es un orgullo verlo cada fin de semana y ver que le hace ilusión cada vez que le dedico un gol”.