Las clarisas de Belorado no ceden en su pulso a la Iglesia
IGLESIA
Su portavoz acusa al arzobispo de Burgos de estar esperando por una “operación inmobiliaria”
El portavoz de las clarisas de Belorado (Burgos), José Ceacero, acusó al arzobispo de Burgos, Mario Iceta, de querer hacer una “operación inmobiliaria” e “imponer a la fuerza el derecho canónico por encima del civil”.
El religioso se refirió a la situación generada después de que las clarisas de Belorado y Orduña anunciaran su abandono de la Iglesia Conciliar para estar bajo la tutela y jurisdicción de la llamada Pía Unión Sancti Pauli Apostoli, fundada por Pablo de Rojas.
El origen de la polémica está vinculado a una operación inmobiliaria fallida y este mismo viernes las clarisas se negaron a recibir a una comitiva enviada por la Santa Sede, requiriendo la presencia de una patrulla de la Guardia Civil, acudiendo posteriormente al juzgado.
Tras señalar que las monjas clarisas están llevando la situación “con bastante normalidad y naturalidad”, el religioso advirtió que cuando “dieron el paso sabían a qué se enfrentaban”, en referencia a una posible “excomunión y a cualquier tipo de sanción”. Ceacero, que recordó que las religiosas “no reconocen la legitimidad” del arzobispo de Burgos, Mario Iceta, ni del papa Francisco, subrayó que seguirán actuando “con normalidad”.
El arzobispo de Burgos, Mario Iceta, fue nombrado hace una semana comisario pontificio de los monasterios de las clarisas de Belorado, Orduña y Derio, y prohibió el acceso y permanencia en el convento burgalés y en todos sus inmuebles “a los señores Pablo de Rojas y José Ceacero” y a cualquier persona vinculada a la Pía Unión de San Pablo Apóstol.
ORDEN JUDICIAL
Asimismo, el prelado de Burgos aseveró que se remitió un burofax a la superiora del convento “para comunicarle la finalización de su mandato y el nombramiento del comisario pontificio con efectos inmediatos” .
Mario Iceta aseveró que lo que más le “ocupa y preocupa” es la situación de las monjas, con las que quisiera ser “muy delicado”, al tiempo que defendió una interlocución con ellas para que vean que es “una situación que es muy importante para la vida de ellas y para todos”, e insistió en que se irán tomando las decisiones.
Respecto al burofax, Ceacero reconoció que en el mismo se les instaba a abandonar el inmueble, posibilidad que rechazó mientras no haya una orden judicial. Por otro lado, aseguró que las monjas recibieron “un decreto canónico” y no ninguna notificación civil. Según relató, en el decreto canónico se les citaba dentro de un plazo de diez días para comparecer ante el tribunal eclesiástico, “ratificar su postura y poderlas así excomulgar”.
“Hacen esto porque, con el derecho canónico en la mano, no pueden excomulgar ‘in genere’ a una comunidad. La excomunión tiene que ser individual y para eso tienen que cerciorarse de que, de manera individual, ellas ratifican su posición. Así, una vez que las excomulgan, entonces disolver la entidad jurídica y poderse quedar con los inmuebles”, expuso.
A su juicio, el arzobispo Mario Iceta estaría de este modo “imponiendo de facto el derecho canónico por encima de la voluntad de separación de dos entidades con personalidad jurídica propia”. Por último, aseguró que se seguirán oficiando en el lugar sus misas, aunque las monjas no quieren tener la iglesia abierta para evitar que “se llene de cámaras” hasta que “todo vuelva a la normalidad”, indicó.
Contenido patrocinado
También te puede interesar
ELECCIONES EN EXTREMADURA
Casi 891.000 extremeños están llamados a votar este domingo en las elecciones autonómicas del 21D
Lo último
PRIMERA FUTGAL
El empate les supo a poco al Maceda y Peroxa (1-1)
PRIMERA FUTGAL
El Maside vuelve a sonreír a costa del Allariz (1-2)
REMONTADA Y TERCEROS
El Arnoia nunca deja de creer y logra el empate ante el Pontevedra B (2-2)