El coloso chino SAIC (MG) estudia la Plisan de Galicia para su primera fábrica europea

La posibilidad de que Galicia albergue la primera fábrica de vehículos de SAIC Motor en Europa ha pasado de ser una hipótesis a convertirse en una opción seria. En las últimas semanas, el grupo chino (matriz de MG) ha intensificado sus contactos con la Xunta y una delegación visitó Galicia para reunirse con la Administración autonómica y la Autoridad Portuaria de Vigo. También inspeccionaron la Plataforma Logística de Salvaterra-As Neves (Plisan), que es actualmente el emplazamiento con más opciones.

Este movimiento confirma que Galicia ha ganado peso en la fase final de la decisión, aunque compite con otras localizaciones en España y Europa del Este. Según fuentes cercanas, la visita buscaba profundizar en los aspectos técnicos y logísticos de una posible factoría que arrancaría ensamblando vehículos bajo el modelo CKD, con piezas enviadas desde China para su montaje local.

SAIC estudia instalar producción en la UE para evitar los aranceles europeos a los coches eléctricos chinos. Su estrategia “Glo-cal” combina estándares globales con fabricación local, reduciendo tiempos de entrega. La empresa es hoy la marca china que más crece en el extranjero, con más de un millón de ventas anuales fuera de China por tercer año consecutivo, y con Europa y Reino Unido representando ya el 25% de ese volumen. En primavera, la compañía subrayó que ambos mercados son la base de su expansión, con un centro de diseño ya operativo, otro de ingeniería en marcha y planes de localización productiva en Europa, donde Vigo compite.

La principal ventaja de Galicia no es solo el suelo disponible, sino su ecosistema industrial: la planta de Stellantis en Vigo ha generado una red de proveedores muy cualificada. No obstante, la opción de fabricar en instalaciones de terceros no parece viable en Balaídos, ya que Stellantis está aliada con Leapmotor, rival de SAIC. La logística marítima también favorece a Vigo, clave para exportar a Reino Unido —mercado fuerte para MG— y distribuir en España.

El proyecto ocuparía unos 500.000 m² y podría crear miles de empleos directos. Si las negociaciones prosperan, la producción podría empezar a finales de 2027. Aun así, las autoridades gallegas mantienen prudencia, conscientes de la fuerte competencia. En España también optan la Comunidad Valenciana (Sagunto y Cheste), Cantabria y Aragón. A nivel internacional, Hungría y la República Checa ofrecen costes laborales menores, aunque sin la ventaja atlántica de Galicia y con una posición más central para la distribución. La decisión dependerá del equilibrio entre costes, logística y ayudas públicas.