PREMIO FORQUÉ
José Manuel Lorenzo, más osado que valiente
El histórico balneario de Cortegada ha perdido sus salutíferas funciones con las que fue inaugurado en 1937 pero ha ganado un restaurante con un magnífico balcón al Miño, el Madre Auga. Recuerdo la primera vez que lo vi, desde el tren que pasa por la otra orilla, hace ya muchos años, un día de niebla. Parecía un buque fantasma, abandonado a su suerte. Desde entonces haga lo que haga cuando voy en tren me fijo al pasar por ese punto para poder ver este coqueto edificio de aire modernista francés.
Su uso como restaurante llegó tras la pandemia. Ofrece una carta no muy extensa pero sí bien surtida para quienes quieran carne o una de sus cuatro modalidades de bacalao que la cocinera, como buena portuguesa de Melgaço borda. En esta primera ocasión probé el Bacalao Peregrino, con volandeiras, gambones y patata panadera. Un trabajo bien realizado con buena materia prima y raciones generosas.
El nombre del plato puede que tenga relación con el Camino Miñoto que pasa por allí cerca y los vínculos de este restaurante con Portugal también se pueden comprobar en su carta de vinos, donde Alvarinhos de Melgaço y otros vinhos verdes comparten bodega con ribeiros de colleiteiro. Cocina muy digna, un servicio amable y diligente y una terraza tan espléndida al Miño me proporcionaron una comida inolvidable y muchas ganas de repetir viaje.
Contenido patrocinado
También te puede interesar
PREMIO FORQUÉ
José Manuel Lorenzo, más osado que valiente
GRUPOS MUSICALES
La playlist de... Tesouro
BANDA OURENSÁ
O tesouro da amizade
GRUPOS MUSICALES
La playlist de... LISE L.
Lo último