Entra en vigor el nuevo Reglamento de Extranjería con cambios en el arraigo, reagrupación familiar y permisos para estudiantes

El Ejecutivo estima que permitirá la regularización de hasta 300.000 migrantes al año, aunque organizaciones sociales han mostrado su preocupación por el impacto que tendrá en los solicitantes de asilo rechazados.

Tres migrantes en el exterior del Hotel Río Ulla, a 20 de septiembre de 2024, en Monterroso, Lugo|EP
Tres migrantes en el exterior del Hotel Río Ulla, a 20 de septiembre de 2024, en Monterroso, Lugo|EP

El nuevo Reglamento de Extranjería aprobado por el Gobierno el pasado 19 de noviembre entra en vigor este martes con el objetivo de flexibilizar y modernizar el sistema migratorio español. El Ejecutivo estima que permitirá la regularización de hasta 300.000 migrantes al año, aunque organizaciones sociales han mostrado su preocupación por el impacto que tendrá en los solicitantes de asilo rechazados.

La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, ha afirmado que esta reforma busca “simplificar y agilizar los procedimientos”, reduciendo la presentación excesiva de documentación y los plazos de tramitación. También pretende mejorar la concreción jurídica de las figuras migratorias y garantizar los derechos de las personas trabajadoras extranjeras.

Una de las novedades más importantes es la creación del permiso para familias de españoles, que unifica el arraigo familiar y el régimen comunitario. Esta nueva figura podrá ser solicitada tanto por familiares directos como por miembros de la familia extensa que acrediten estar a cargo del ciudadano español. Se amplía de 21 a 26 años la edad máxima para la reagrupación de hijos, mientras que los ascendientes mayores de 65 años deberán demostrar dependencia económica, salvo que tengan más de 80 años. Además, tanto hijos mayores de edad como padres y suegros podrán iniciar el trámite desde España, sin necesidad de regresar a su país de origen.

El reglamento también introduce cambios en las modalidades de arraigo, que ahora quedan unificadas en cinco categorías: social, socioformativo, sociolaboral, familiar y de segunda oportunidad. Se reduce de tres a dos años el tiempo mínimo de permanencia en España para acceder a estas vías, se flexibilizan los requisitos y se permite trabajar desde el primer momento, ya sea por cuenta ajena o propia.

En cuanto a los estudiantes extranjeros, la normativa les permitirá trabajar hasta 30 horas semanales y cursar hasta el 50 % de sus estudios en modalidad online. Se flexibilizan además los requisitos económicos para obtener el permiso, y los familiares de estudiantes podrán solicitar su residencia desde España si ya viven legalmente en el país. No obstante, esta autorización no se aplicará a menores.

A pesar de las mejoras, varias organizaciones sociales —entre ellas Andalucía Acoge, Cáritas, CEAR, Red Acoge y el Servicio Jesuita a Migrantes— presentaron en enero un recurso ante el Tribunal Supremo. Consideran que la norma perjudica gravemente a las personas cuya solicitud de asilo ha sido rechazada, ya que impide que el tiempo de estancia legal durante la espera de resolución pueda ser contabilizado para solicitar un permiso de residencia posterior.

El Ministerio ha anunciado la incorporación de 750 nuevos trabajadores a las Oficinas de Extranjería para asumir el incremento de la carga de trabajo que se prevé con la entrada en vigor del nuevo reglamento.

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