Israel ataca el sur de Líbano tras interceptar el primer ataque transfronterizo desde diciembre

El Ejército de Israel ha llevado a cabo un ataque sobre la localidad libanesa de Khiam, en el sur de Líbano, después de interceptar tres cohetes disparados desde esa zona hacia la ciudad israelí de Metula. Este enfrentamiento marca el primer ataque transfronterizo desde diciembre.

Por su parte, el Ministerio de Salud de Líbano ha confirmado que al menos dos personas han fallecido, entre ellas una niña, a raíz de un bombardeo israelí en Toulin, dentro del municipio de Nabatiye. Además, al menos ocho personas han resultado heridas, entre ellas dos menores. Sin embargo, la cifra de víctimas aún es incierta, ya que el alcalde de la localidad, Malek Aouali, ha señalado que los fallecidos podrían ascender a cuatro, según declaraciones recogidas por L’Orient le Jour.

Hasta el momento, no se han reportado víctimas en Israel por el lanzamiento de los cohetes.

Mientras Hezbolá aún no se pronuncia sobre lo ocurrido, el Ejército libanés ha desmantelado tres lanzaderas rudimentarias de madera y ha asegurado a Israel que está tomando medidas para preservar la seguridad en la zona. Ante la escalada de violencia, el presidente de Líbano, Joseph Aoun, y el primer ministro, Nawaf Salam, han hecho un llamado urgente a la calma en la frontera con Israel.

"Lo sucedido en el sur representa un ataque continuo contra Líbano y pone en peligro el plan de rescate acordado por todos los libaneses", advirtió el mandatario, instando a "todas las partes involucradas a actuar con la máxima responsabilidad para evitar una escalada mayor".

Desde Israel, el jefe del Estado Mayor del Ejército, general Eyal Zamir, dejó claro que las fuerzas israelíes responderán con contundencia y recordó al gobierno libanés su responsabilidad de mantener el alto el fuego pactado en noviembre entre Israel y Hezbolá.

Por otro lado, el primer ministro libanés, Nawaf Salam, advirtió que la creciente tensión en la frontera podría arrastrar al país a una guerra devastadora. En este sentido, ha iniciado conversaciones con el ministro de Defensa, Michel Mansi, para garantizar que "solo el Estado libanés tiene la autoridad sobre la guerra y la paz", en una clara alusión a Hezbolá.

Cabe recordar que, tras el cese de hostilidades, tanto Israel como Hezbolá debían retirar sus fuerzas del sur de Líbano. No obstante, el Ejército israelí ha mantenido cinco posiciones en territorio libanés, argumentando que las milicias siguen operativas en la zona.

En respuesta a la última agresión, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha ordenado nuevos bombardeos contra múltiples objetivos de Hezbolá. A su vez, el ministro de Exteriores, Israel Katz, ha advertido de nuevas represalias.

"Hemos prometido seguridad a las comunidades de Galilea, y eso es exactamente lo que haremos", aseguró Katz.

El Ejército israelí también ha confirmado ataques contra "docenas de posiciones de lanzamiento de cohetes de Hezbolá y un centro de mando" en el sur de Líbano, aunque por ahora no ha ofrecido más detalles.