Carballeda de Avia ofertará viviendas modulares por 100 euros al mes

Muimenta se transforma en una aldea de vacaciones, fundamentalmente para jubilados, un fin que el Concello de Carballeda de Avia añade al proyecto inicial de esta aldea modelo destinada inicialmente a la formación y posterior trabajo de emprendedores en agricultura ecológica y transformación de cultivos.

El proyecto contempla la creación de viviendas modulares a partir de la rehabilitación de casas de piedra ruinosas, cuyos inquilinos compartirán servicios comunitarios. De esta forma, ya está rematada la cocina y comedor y tras la adquisición de otros seis inmuebles están en marcha las obras para la creación de los dos primeros módulos, cada uno dotado de una habitación, despacho y baño, y en la que se instalará la lavandería, que también será compartida. Las obras estarán acabadas en aproximadamente mes y medio, para coger ya a los primeros inquilinos, que solamente pagarán 100 euros mensuales de alquiler por módulo.

Atraer turistas es el principal objetivo de este nuevo proyecto para Muimenta, dirigiendo la promoción de forma especial a los jubilados de las ciudades, deseosos de unas vacaciones en contacto con la naturaleza, de precios asequibles, servicios sanitarios y los demás necesarios, y en lugares bien comunicados como es el caso de esta aldea. “Os xubilados queren sair do agobio das cidades pero aínda que desexan alquilar hai pouca oferta”, puntualiza el alcalde Luis Milia.

La Federación Española de Municipios y Provincias ha elegido este proyecto, que se abordará el próximo lunes en la Comisión de derechos de los mayores, soledad y atención a la dependencia, familia y reto demográfico. Milia, que forma parte de la comisión, hará la exposición como una alternativa de desarrollo para el rural. “As administracións teñen que concienciarse que hai que investir no rural, que é a única forma de salvalo, de evitar que as nosas aldeas morran”, matiza.

Así, Muimenta se va transformando paulatinamente para acoger a emprendedores y turistas, siguiendo el diseño arquitectónico de la Fundación Ria. A través del Agader se invirtieron 50.000 euros en la adquisición de las viejas casas, que también aporta 150.000 euros a la rehabilitación de la primera con dos módulos, presupuestada su rehabilitación en 180.000 euros, que completa el concello.