Aprobado el "tarifazo" de la basura por el Concello de Ourense gracias a la abstención del PP

PLENO EXTRAORDINARIO

El Concello de Ourense sacó adelante este lunes, en un pleno extraordinario, los tres puntos incluidos en el orden del día. Entre las aprobaciones se encuentra el "tarifazo" de la basura

Votación en el pleno extraordinario del Concello de Ourense
Votación en el pleno extraordinario del Concello de Ourense | Marcos Atrio

El pleno extraordinario del Concello de Ourense estuvo marcada por la aprobación definitiva de la nueva ordenanza reguladora de las tarifas del servicio de recogida y tratamiento de residuos, que fue avalada con los votos de Democracia Ourensana y la abstención del PP, mientras que PSOE y BNG votaron en contra. También se aprobó el convenio con Barbadás para el servicio de saneamiento y el cumplimiento de la deuda de en torno a 16 millones de euros con Viaqua por la prestación de abastecimiento hasta el 31 de diciembre de 2024.

Subida de la tasa de la basura

La nueva ordenanza supone la primera actualización de la tasa de la basura en más de doce años y conllevará una subida de la tarifa de aproximadamente un 45%. Desde el grupo de gobierno se defendió la necesidad de adaptar las tarifas al coste del servicio y aplicar el principio de “quien contamina paga”, estableciendo diferencias entre grandes y pequeños productores de residuos.

La concejala de Democracia Ourensana Tamara Silva defendió que la ordenanza introduce criterios de proporcionalidad en función de la generación de residuos. Desde la oposición, las críticas fueron contundentes. La portavoz del BNG en este punto, Erea Blanco, aseguró que la ordenanza “non cumpre nin co servizo” y advirtió de que Ourense comenzará 2026 “cun servizo máis caro pero sen melloras”, lo que calificó como “pagar máis polo mesmo”.

Por su parte, la concejala socialista María Fernández Ojea denunció que el Concello “non paga o servizo de recollida de lixo” y que la subida, cercana al 45%, se basa en una estimación técnica, mientras el Ayuntamiento mantiene una deuda millonaria con la empresa concesionaria. También cuestionó el alcance real de las bonificaciones incluidas en la ordenanza, al señalar que solo beneficiarían a nueve unidades familiares.

Jácome recriminó a la edil socialista actuar con “hipocresía y cinismo”, al tratarse el cambio de ordenanza una consecuencia de las normativas del Gobierno Central, protagonizando uno de los momentos más tensos de la sesión, al llegar a referirse indirectamente a Fernández Ojea como “loca”.

Desde el PP, Jorge Pumar justificó la abstención de su grupo al señalar que durante el trámite de información pública solo se presentaron seis alegaciones y que la ordenanza permite flexibilidad en la aplicación de la tasa. Finalmente, la ordenanza fue aprobada con los votos a favor de Democracia Ourensana, la abstención del PP y el rechazo de PSOE y BNG.

Convenio con Barbadás para el saneamiento

El segundo punto del pleno fue la aprobación del convenio de cooperación entre los concellos de Ourense y Barbadás para la prestación del servicio de saneamiento y depuración de aguas residuales durante el período 2025-2028, así como la liquidación de la compensación económica pendiente desde 2006, hasta el 2024.

El acuerdo permitirá regularizar la situación tras una década y establecer un marco estable de colaboración, con el compromiso del Concello de Barbadás de abonar cerca de 970.000 euros. Tanto el BNG como el PP reclamaron mayores mecanismos de control, como la instalación de caudalímetros para medir el consumo real y verificar la deuda. El acuerdo fue aprobado con el voto favorable de todos los grupos, excepto el BNG, que se abstuvo.

Deuda con Viaqua

El pleno aprobó también el reconocimiento extrajudicial de una deuda cercana a los 16 millones de euros con la empresa Viaqua por la prestación de los servicios de abastecimiento, saneamiento y depuración de aguas residuales hasta el 31 de diciembre de 2024. Desde el gobierno municipal se defendió la operación destacando un ahorro de casi 8 millones de euros respecto a las reclamaciones iniciales de la concesionaria.

El PSOE optó por la abstención, alegando responsabilidad institucional para no perjudicar a la ciudad, mientras que el PP apoyó el reconocimiento de la deuda por dicho motivo, “para non perxudicar máis a cidade”, como señaló la concejala Ana Méndez.

Mientras que el BNG utilizó el mismo argumento de la responsabilidad para votar en contra de considerar que se asume la deuda sin conocimiento suficiente y sin informes contradictorios.

“Acaso é responsable asumir una débeda que non sabemos faltando informes tan importantes como o da Oficina de Xestion Económica e Orzamentaria ou o da intervención xeral, a min en todo caso pareéceme una auténtica irrresponsabilidade”, destacó Luis Seara que resaltó que “Viaqua di que é de 16 millóns, como podía haber dito que é de 25, en base a un contrato do ano 1992 xa extinto”.

Con el respaldo de Democracia Ourensana y el PP, la abstención del PSOE y el voto en contra del BNG, el punto quedó aprobado.

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