Carpetazo definitivo para la ordenanza de basuras

contenedores en el aire

La administración Jácome renuncia a recurrir la anulación del contrato de basura por 160 millones de euros, manteniendo un servicio precario y retrasando la llegada de nuevos contenedores y el aumento de la tasa.

Operarios de limpieza trabajan en la Plaza Mayor.
Operarios de limpieza trabajan en la Plaza Mayor.

La administración Jácome puso fin un mes y medio después a los trámites de un nuevo contrato para la gestión de la basura en la ciudad, que pretendía adjudicar durante diez años por un monto de 160 millones de euros.

La reunión de la junta de gobierno celebrada ayer confirmó que el consistorio no recurrirá la decisión tomada por la Xunta de Galicia a través del Tribunal Administrativo de Contratación Pública, donde se aceptaron las alegaciones presentadas por dos empresas sobre que el pliego no contemplaba la inclusión de personas con discapacidad.

“A Xunta Local acordou non recorrer a resolución e ordenar a elaboración dun novo expediente de contratación do servizo, corrixindo os erros ou omisións que levaron á anulación do expediente precedente”. De esta forma, el gobierno municipal ponía fin a cualquier intento de avanzar en la nueva gestión de los residuos después de mostrarse muy crítico con la administración autonómica, a quien llegó a acusar de realizar un “bloqueo institucional”.

CONTENEDORES EN EL AIRE

El reinicio de la tramitación supone que la basura se seguirá recogiendo a través de un contrato precario, y por el momento, no llegarán nuevos contenedores a la ciudad como el marrón, exclusivo para residuos orgánicos, que se encuentra implantándose en estos momentos. También queda en el aire la subida prevista de la tasa de basuras, prevista en un 100%.

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