Dejó morir a siete perros: sin comida, agua y entre suciedad

Tomás N.D. (47 años) tenía 13 perros de raza rotweiller, a los que no atendía, en una finca de Vilanova dos Infantes (Celanova). Tanto es así, que siete de ellos murieron de inanición. Otros seis sobrevivieron, pero cuando intervino el Seprona, el 2 de enero de 2023, presentaban una delgadez extrema. El inculpado lo admitió ayer en el Juzgado Penal 1 y aceptó una pena, conformada previamente, de un año de cárcel y una multa de 60 euros por un delito continuado de maltrato animal. La misma sentencia le impone dos años y tres meses de inhabilitación para la tenencia de animales o cualquier profesión que tenga relación con ellos.

El inculpado, tal como admitió ayer, de manera completamente consciente e injustificada dejó de prestar los cuidados básicos a los cánidos. Las instalaciones en las que estaban carecían de comederos y bebederos y “con unas condiciones higiénicas de suciedad exageradas”.

Las necropsias revelaron que murieron de inanición, puesto que no fueron hallados signos macroscópicos de enfermedad, además de mucha suciedad en el pelo. Los signos cadavéricos y que justifican la inanición son: prominencias óseas visibles a simple vista, ausencia de tejido graso, pérdida evidente de masa muscular, pelo seco, descamación cutánea, ausencia de alimento en el tracto digestivo con presencia de bilis, vesícula biliar repleta y deshidratación evidente.

Los animales vivos fueron trasladados al Centro de Recuperación de la Fauna de la Xunta en O Rodicio, por lo que deberá hacerse cargo de ese gasto, que se determinará durante la ejecución de la sentencia.