Un robo de casi 80 móviles en el centro de Ourense sigue sin juicio once años después

EXPEDIENTE SANCIONADOR

La vista por un caso del robo de móviles en Ourense fue aplazada 5 veces, las 4 últimas por la huelga del Turno que secunda una abogada

El inculpado vendía los móviles a precio de ganga.
El inculpado vendía los móviles a precio de ganga.

Luis Miguel D.S.M. tenía 22 años cuando supuestamente perpetró el robo de casi 80 móviles en una tienda Vodafone del número 45 de la calle Santo Domingo, en Ourense. Ahora, ya casi peina canas, y en ese bajo en vez de móviles se venden casas. Pero, pese al tiempo transcurrido, él y otras doce personas tienen cuentas pendientes con la justicia desde hace once años.

El proceso penal por el robo de móviles en abril de 2014, un asunto penal con 13 acusados, sigue sin juicio. La quinta vez que el Juzgado Penal 2 de Ourense se ve obligado a aplazar la vista por motivos ajenos al órgano judicial. El primer señalamiento se remonta a julio de 2023, pero el principal inculpado renunció a su abogado del Turno, aunque después no designó uno nuevo y volvió a la casilla de salida.

Este miércoles tampoco pudo celebrarse la vista oral porque la letrada de uno de los inculpados secundó la huelga de los abogados adscritos al servicio de Justicia Gratuita. El mismo motivo de los cuatro aplazamientos anteriores. Pero, en esta ocasión, la magistrada del Penal 2 confirmó que procederá a la apertura de un expediente sancionador contra la abogada.

Compra de los móviles pese a saber que eran robados

Doce de los investigados están acusados de receptación -la compra de los terminales a sabiendas de su procedencia ilícita- y el principal inculpado, Luis Miguel D.S.M., de la sustracción en la tienda que Vodafone tenía en esa calle en 2014.

Precisamente, el ministerio público pide hasta cinco años de cárcel para el principal inculpado, Luis Miguel D.S.M., por un delito continuado de robo y ocho meses para el resto de compañeros de banquillo. Fue imputado por supuestamente romper con un objeto contundente el cristal de la puerta de acceso.

Hubo dos robos, el primero está fechado en la madrugada del 2 de abril de 2014. El ladrón se apoderó de más de 40 terminales, además de 150 euros que estaban en la caja registradora. Los móviles fueron valorados en 7.231 euros.

El fiscal sostiene que Luis Miguel los vendía posteriormente a precio de ganga, entre 50 y 20 euros, o incluso en una ocasión a cambio de un tatuaje o ropa de vestir. El mismo negocio fue asaltado seis días después. El procedimiento para entrar fue el mismo, pero en esta ocasión había 150 euros en la caja registradora y el botín se completó con otros 33 teléfonos móviles valorados en 10.744 euros, además de otros 150 euros por los desperfectos ocasionados en la tienda.

Contenido patrocinado

stats