Adrián Feijóo: “Cuando vuelvo y estoy en Nocelo tengo una sensación de libertad única”

Adrián Feijóo Pérez es un joven de Barcelona, que a sus 16 años disfruta con locura de sus regresos al pueblo. Cuando vuelve a Nocelo de San Mamede, en el concello de Porqueira, siente una “libertad única”, y según cuentan sus vecinos es rara avis entre los chicos de su edad, ya que prefiere las relaciones vecinales y el ritmo de vida rural al de la gran ciudad desde antes de tener uso de razón.

Pregunta.¿Cuándo sueles volver a Nocelo?

Respuesta.Todos los años en verano he venido aquí, desde que era muy pequeño y siempre me ha gustado la verdad.

P.¿Cuánto tiempo pasas aquí?

R.Si vengo con mi tía y mi abuela, estoy algo más de un mes, pero si vengo con mis padres, algo menos. Me suelo ir con ellos directos a Barcelona, porque yo empezaba las clases cuando mi padre empezaba a trabajar.

P.¿Qué es lo que más te gusta de estar aquí?

R.La libertad, sobre todo la libertad. Poder salir y hacer básicamente lo que quiero. Puedo ir a cualquier lado en bicicleta y que casi ni pasen coches. Poder salir a cualquier hora sin preocupaciones… Aquí tengo una sensación única.

P.¿Cómo llevas que haya menos gente aquí que en Barcelona?

R.Es una cosa que, por una parte, me gusta. A mí la multitud me agobia mucho, pero, por otra parte, también es malo porque tengo menos amigos aquí.

P.¿Tienes amigos aquí?

R.Sí, aunque vienen poco. No viven aquí y vienen a veces en verano, aunque no todos los años. Además, son algo más mayores que yo. Este año he conocido a un amigo nuevo, que nunca antes había coincidido con él aquí. También tengo amigos de aquí de la zona, de Xinzo, que cuando era más pequeño solía ir mucho más con ellos. Tengo muy buena relación con todos y guardo muchos recuerdos de ellos.

P.¿No sales mucho de Nocelo?

R.No, a mí me gusta esto. Salgo de vez en cuando a Xinzo o a Ourense, pero poco más.

P.¿Participas en la vida vecinal?

R.Sí, a mí todos los vecinos me caen muy bien y guardo buena relación con ellos. Cuando nos reunimos a comer juntos como el otro día la verdad lo pasamos muy bien. Me gusta estar y hablar con la gente de aquí, porque los conozco desde muy pequeño.