Alarmante incremento de los delitos cometidos por jóvenes en Ourense

La provincia de Ourense experimentó un alarmante crecimiento de los delitos cometidos por menores el pasado año. Así lo refleja la estadística de la Estadística de Condenados publicada este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE). En concreto, de los datos se desprende que en el 2024 los menores cometieron 150 infracciones penales, una cifra que duplica a las perpetradas en 2023 (72) y que marca la segunda cifra más alta de la serie histórica, solo superada por el 2013 (174 infracciones).

De las 150 infracciones penales cometidas a lo largo del pasado año, 80 fueron realizadas por varones y 70 por mujeres, más del triple que en 2023. Por grupos de edad, el de 17 años fue el que tuvo la mayor cantidad (72), seguido de los de 16 años (38) y los de 15 y 14 años, ambos con 20. La mayoría de las infracciones fueron perpetradas por menores con nacionalidad española (90%).

Si analizamos la estadística de condenados a lo largo del pasado año, también nos encontramos con que repunta la cifra de penas a menores en la provincia. En total, fueron 58 los menores condenados, la cifra más alta en el último lustro y que refleja un repunte de los menores ourensanos condenados tras el fin de la pandemia. La mayor parte de los condenados, un total de 48 fueron hombres, frente a tan solo 10 mujeres.

Del total de menores penados, tres de cada cinco (un total de 33) cometieron una única infracción penal, y dos de cada cinco (25) más de una.

Advertencia de la Fiscalía

La Memoria anual de la Fiscalía General del Estado reflejó en 2024 un descenso global de la criminalidad cometida por menores, pero también una “seria preocupación y alarma” por el auge de conductas cada vez más violentas en varias provincias entre las que se encontraba Ourense. El Ministerio Público apunta a la necesidad de una “intervención intensiva” en el ámbito social y educativo, tanto con los menores como con sus familias, y destaca experiencias positivas como la prohibición del móvil en las aulas o los buzones anónimos de denuncia implantados en ciudades como Pontevedra.