El “fermosismo” extiende su modelo hasta 77 municipios

El fermosismo sigue ganando adeptos. Asociaciones de vecinos, concellos y particulares de la provincia de Ourense se han aliado para erradicar los impactos paisajísticos que perjudican la imagen de núcleos y villas. El pintado de fachadas, la reparación de cubiertas y muros de cierre, pero también la retirada de elementos adyacentes que perjudiquen la imagen o causen algún tipo de impacto en el inmueble a intervenir, son las actuaciones más comunes ejecutadas en el rural ourensano, al amparo del programa Fermosismo, una iniciativa de la Consellería de Medio Ambiente e Cambio Climático que, en cuatro años de vigencia, ha logrado sentar las bases -junto con otras líneas y agentes externos- para dar un cambio de mentalidad en cuanto al feísmo se refiere.

El Instituto de Estudios del Territorio gestiona las ayudas para actuaciones de corrección de impactos paisajísticos

A la espera de resolver la convocatoria de 2025, que en los dos primeros días se recibieron en el Instituto de Estudos do Territorio 1.395 solicitudes entre particulares y concellos de menos de 20.000 habitantes, de las que 262 procedían de Ourense, con intervenciones financiadas en 77 concellos y una inyección de fondos públicos que alcanza los 2,5 millones de euros.

Particulares y Concellos

Las actuaciones promovidas por los particulares son las más numerosas, 454 iniciativas que han recibido un total de 1,2 millones. Lobios, con 115 actuaciones, ha sido el municipio con más intervenciones subvencionadas, seguido por Celanova con 31, Ourense con 25 y Boborás con 21. En 22 concellos no se ha aprobado, hasta el momento, ninguna subvención a particulares.

En la línea para entidades locales, en estos cuatro años 43 concellos resultaron beneficiarios por el programa, siendo Ourense la provincia gallega donde más solicitudes se han aprobado, con una inversión de 1,3 millones de euros que han permitido recuperar fuentes y lavaderos, antiguas escuelas o espacios públicos. En 49 concellos no se ha acometido ninguna actuación por esta vía, en cuya resolución se tiene en cuenta el orden de entrada de las solicitudes. En un desglose por municipios, A Veiga lidera el ránking con nueve solicitudes concedidas, seguido de Cartelle con cinco y siete concellos con cuatro, son Bande, Boborás, Castrelo do Val, Muíños, Parada de Sil, Porqueira y San Xoán de Río.

Lobios | “El cambio más importante ha sido el de la mentalidad”

El cambio urbanístico en Puxedo (Lobios) ha sido total. Iniciativa pública y privada han ido de la mano, con la implicación de la asociación de vecinos, para hacer de esta aldea del Xurés el paradigma del “fermosismo”. Solo a través de este programa se han llevado a cabo 115 actuaciones en el patrimonio privado en estos cuatro años. “El mayor cambio ha sido sobre todo el de mentalidad, se ha superado el derrotismo y recuperado la autoestima. Antes nadie invertía aquí porque consideraban que era tirar el dinero y ahora ven que el pueblo tiene futuro y se puede rentabilizar la inversión y que puede ser un lugar para vivir ellos y sus descendientes”, señala el portavoz vecinal, Pablo Rodríguez, quien apunta a la burocracia como la mayor dificultar a la hora de llevar a cabo las actuaciones, “desde regularizar los inmuebles en el Catastro, porque muchas veces no están inscritos; hasta obtener todos los permisos del Concello o de Patrimonio. También se está complicando encontrar mano de obra para acometer los proyectos en los plazos estipulados”.

La puesta en marcha del programa, considera Rodríguez Paz, “es muy acertado porque uno de los mayores activos que tiene Galicia es su paisaje. Durante muchos años, debido a la falta de control y dificultades económicas, se han acometido actuaciones poco acordes con la arquitectura tradicional que consagraron el “feismo gallego”. Más allá de la ayuda económica, la línea ayuda “a concienciar a la población de la importancia de proteger nuestro paisaje construido”, señala desde el colectivo que ha servido de ejemplo de buenas prácticas en materia de difusión y colaboración vecinal a la hora de tramitar las ayudas.

BOBORÁS | El Concello se alía con los vecinos en la apuesta por la estética

Boborás ha sido uno de los municipios destacado por la Consellería de Medio Ambiente e Cambio Climático como ejemplo de buenas prácticas en fermosismo, por actuaciones para la corrección de impactos paisajísticos en viviendas y propiedades privadas. El Concello ha capitaneado cuatro actuaciones en lavaderos: Curro de Feás, Miandreiras, Xendive y Nogueira. Uno por año. Mientras, la iniciativa privada ha llevado a cabo un total de 21 intervenciones, siendo el año 2022 el más concurrido con 11 actuaciones aprobadas. “Personalmente, considero que se trata de una subvención fantástica, que logra mejorar la estética de las propiedades privadas, pero también del conjunto del pueblo”, señala Patricia Torres, alcaldesa de Boborás que se encarga personalmente de informar a los vecinos cada vez que sale la convocatoria, pero también de tramitar las solicitudes y justificarlas. “Hacemos campaña para presentar y, el día que se abre el plazo, estamos a las doce de la noche metiendo solicitudes. Si no se presentan a esa hora, no tienen opciones”, reconoce Torres, contenta con la labor que realizan y con el resultado, “además de mejorar la estética, mueven la economía y también genera un cambio de mentalidad”.

Este servicio que se ofrece desde el Concello a todas las parroquias, apunta Torres, permite que las intervenciones se lleven a cabo en diferentes puntos del municipio. Una distribución que también tratan de aplicar en las propuestas municipales, con el objetivo de mejorar la estética de los elementos etnográficos. La suma de las ayudas recibidas por la administración y los propietarios -25 en total- alcanza los 101.590 euros. Para este año, la propuesta -pendiente de resolución- es el lavadero de Laxas.

CELANOVA | Intervenciones que redundan en el patrimonio y el atractivo local

Celanova fue en 2024 el municipio gallego que ejecutó mayor número de actuaciones en fermosismo, cuyo grueso se concentró en el burgo medieval de Vilanova dos Infantes. “Acabar co feísmo é cousa de todos. O primeiro ano fíxose un pasadizo na zona interior de Vilanova e a partir de aí a xente animouse. O ano pasado tivemos 15 peticións e entraran todas. Este ano foron dez, a ver que pasa… e se non, quedarán en lista para o ano seguinte”, comentaba Xan Carlos Fernández, secretario de la asociación de vecinos Gutier Menéndez, que colaboró con los vecinos en los trámites para la presentación de las solicitudes. “A axuda non dá para todo e a hai xente que o fixo pola súa conta, pero quedan máis contentos e agradecidos si reciben os 3.000 euros”, dijo, señalando que todavía queda “moito por facer, quizais máis da mitade do núcleo. Estaría ben que a administración local tratar de solicitar una Área Rexurbe”, dijo sobre una petición que ya trasladaron, en una visita al núcleo, al alcalde Antonio Puga y a la conselleira Ángeles Vázquez.

Las ayudas, que en el caso de Celanova suman 31 actuaciones en el ámbito privado y tres promovidas por el Concello en los cuatro años de vigencia de esta línea, suman un total de 96.636 euros de fondos públicos para la recuperación del patrimonio, pero también del atractivo global de los núcleos. Así lo resaltaba el alcalde de Celanova, Antonio Puga, quien señaló la importancia de la mejora “estética do pobo, do atractivo do pobo. E nós seguiremos aproveitando cada una das subvencións que poidan saír”, dijo, confirmado la presentación, en la convocatoria de este año, de la actuación en la fuente de Santa María.

A VEIGA | El resultado de la concienciación y la implicación del personal

El Concello de A Veiga lidera el ranking de subvenciones obtenidas en estos cuatro años dentro del programa de ayudas para actuaciones de corrección de impactos paisajísticos destinadas a Entidades Locales, con 9 intervenciones públicas. “A realidade é que nós case sempre estamos na lista top dos concellos en recibir subvencións, ben sexa esta línea de fermosismo como noutras. Algo que quero e temos que agradecer ao equipo do Concello, os traballadores polo seu traballo, esforzo e adicación”, trasladaba el alcalde, Juan Anta, quien señaló también la colaboración del personal para, siempre que es posible y se lo solicitan, colaborar con los vecinos a la hora de informar o consultar las ayudas disponibles. Las subvenciones del ‘fermosismo”, que entre las ayudas concedidas al Concello y a los particulares ha supuesto una inversión de 134.774 euros entre 18 intervenciones, ha permitido llevar a cabo actuaciones de reforma en viviendas, en el caso de particulares, así como de lavaderos públicos, edificios de vivienda municipal o la recuperación integral de la zona de la playa. “Para este ano solicitamos unha restauración na zona da casa cultural do Toural”, adelantó Anta, a la espera de conocer la resolución autonómica.

El alcalde valoraba positivamente estas subvenciones, que se suman a otras líneas y proyectos liderados desde la administración como el programa Por Barrios para, directa o indirectamente, acabar con el feísmo en A Veiga. “É moi importante concienciar á xente”, señalaba Anta, sobre el impacto positivo que tienen estas actuaciones de reducir impactos paisajísticos a la hora de fijar o retener población.