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ABUSOS DE LA IGLESIA
La Asamblea Extraordinaria de la Conferencia Episcopal Española (CEE) aprobó ayer las líneas que orientan la acción de la iglesia en relación a los abusos sexuales cometidos contra menores, personas, el plan de reparación integral a las víctimas, que incluye una Comisión Asesora con expertos. No obstante, los prelados aclararon que lo aprobado no es un decreto que obligue a todas las diócesis.
Así lo confirmó la CEE en un comunicado, minutos de comparecer ante los medios de comunicación para presentar las líneas generales del plan.
El Plan de Reparación Integral a las Víctimas de Abusos sexuales a menores y personas vulnerables equiparadas en derecho (Priva) se aplicará a aquellas víctimas cuyos casos hayan prescrito o el abusador haya fallecido, que no pueden ser juzgados por la vía civil, penal o canónica, y contará con reparación económica. El plan, según adelantaron los prelados la semana pasada, “implicará una personalización de la misma y un acompañamiento técnico, psicológico, médico y también espiritual”.
Según explicó el presidente de la CEE y arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, en la Asamblea Plenaria Extraordinaria, el Plan no incluye una norma de obligado cumplimiento, como pedía el Gobierno. “Nosotros no firmamos ahora un decreto que obligue a todas las diócesis, a las 400 congregaciones religiosas, sino que nos dotamos de unos criterios de comunión para que las personas que puedan pensar que necesitan ser reparadas, que tienen derecho a esta reparación, puedan acudir en primer lugar a cada diócesis, a cada congregación religiosa”, advirtió antes de la rueda de prensa.
Igualmente, en la rueda de prensa explicó que se aprobaron tres documentos por unanimidad por los 67 obispos que participaron. El primero de ellos, expuso que se trata de las líneas de trabajo, organizadas según las sugerencias del Defensor del Pueblo.
Respecto al segundo documento, apuntó que se trata de las líneas generales del Priva. Para su ejecución, según informó la CEE, el Plan recoge la creación de un órgano que coordinará la respuesta integral a las víctimas mediante un procedimiento no judicial. Este organismo tratará de verificar individualmente cada caso para ver la condición de los hechos y establecer el marco de reparación oportuno. La reparación parte de lo que la víctima solicita para su sanación, afecta al victimario y a la institución a la que este pertenecía y busca la reparación integral de la víctima en todos los aspectos.
Asimismo, la CEE añadió que el Plan de atención y reparación a las víctimas tiene cinco ejes de los que se derivan las acciones referidas al reconocimiento de la víctima, la reparación y la prevención. El primero de ellos es la víctima en el centro de la reflexión y la acción de la Iglesia, le sigue la búsqueda “de la verdad y de la justicia”, así como en el enjuiciamiento y determinación de las responsabilidades jurídicas.
Entre los ejes, también está la acción coordinada en lo que se refiere al tratamiento de los abusos sexuales en el seno de la Iglesia, de manera que las medidas adoptadas resulten similares y que la diversidad institucional no redunde en perjuicio de las víctimas.
Finalmente, el tercer documento aprobado es “una especie de reglamento realizado en base de criterios para ver cómo poner la reparación integral en práctica, creando también una Comisión Asesora”. Esta estará formada por diez personas: cuatro expertos del ámbito médico forense, cuatro del ámbito jurídico y un representante de la CEE y otro de la Confer. La Comisión podrá convocar a un representante de las víctimas o de las asociaciones que trabajan con ellas.
La Comisión, con la ayuda de la Vicesecretaría para Asuntos Económicos, elaborará un posible baremo o sistema de valoración de los daños y perjuicios padecidos. Para ello se tendrán en cuenta los baremos propuestos por la ley civil y los criterios orientadores de otras Conferencias episcopales del entorno.
Por su parte, el presidente de la Confederación Española de Religiosos (Confer), Jesús Antonio Díaz , destacó que el Plan es “un marco regulador” que permite “atajar esta realidad” y que pone “especial incidencia en la reparación moral”.
El Priva fue elaborado por el Servicio de Asesoramiento de las Oficinas para la protección de menores, e incorporando las observaciones de los obispos en sus distintas reuniones; las ideas recogidas en el Mensaje al Pueblo de Dios “Enviados a acoger, sanar y reconstruir” (Plenaria noviembre 2023); las indicaciones del Consejo Episcopal de Asuntos Jurídicos; del órgano de Compliance de la CEE; y de la Confer.
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