La silicosis resurge con más de 5.900 casos desde el año 2007

ENFERMEDADES RARAS

Galicia fue la comunidad que concentró el mayor número de casos desde la década de los 90

Un médico sostiene la radiografía de los pulmones de un paciente que padece silicosis.
Un médico sostiene la radiografía de los pulmones de un paciente que padece silicosis.

La silicosis, una enfermedad respiratoria incurable de origen profesional causada por la inhalación de sílice cristalina, ha resurgido en España en las últimas dos décadas con un aumento de casos. Entre 2007 y 2024 se notificaron 5.930 casos, con un máximo de 520 el pasado año, según el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). Este repunte ha llevado a agencias sanitarias a reevaluar los riesgos de la sílice cristalina respirable.

El Ministerio de Sanidad publicó el informe La reemergencia de la silicosis en España, que alerta que “España es uno de los países en los que se ha producido una reemergencia de la silicosis de forma más intensa durante el siglo XXI”. Aunque la silicosis se ha asociado tradicionalmente con la minería, en las últimas décadas ha aumentado en sectores como la fabricación de aglomerados de cuarzo, la construcción y la metalurgia. Estos materiales se usan en la fabricación de encimeras de cocina, baños y otras superficies que generan un alto riesgo para los trabajadores expuestos.

“Hoy sabemos que la exposición a la sílice cristalina respirable no solo provoca silicosis, sino que también está implicada en ciertos procesos como el cáncer de pulmón”, ha señalado Santiago González, subdirector general de Sanidad Ambiental y Salud Laboral del Ministerio de Sanidad. En los últimos seis años, se diagnosticaron 46 casos de cáncer de pulmón por exposición a la sílice, 19 de ellos en 2024, lo que subraya la gravedad de la situación.

Más casos de hombres

España no ha llegado a una meseta en las notificaciones, con una media anual de 400 casos en el periodo 2020-2023. Los hombres, especialmente los jóvenes menores de 50 años, son los más afectados, lo que refleja la exposición más temprana en su vida laboral a los riesgos de estos materiales. Galicia concentró el mayor número de casos, con 1.454, seguida de Castilla y León y Andalucía, lo que sugiere un patrón geográfico asociado a los sectores industriales más prevalentes en estas comunidades.

El análisis de procesos asistenciales confirma el repunte de la silicosis, con un 95,7% de los casos diagnosticados como secundarios. Además, los trabajadores expuestos a la sílice cristalina pueden desarrollar enfermedades como la artritis reumatoide o el lupus. Los costes sanitarios directos son financiados mayoritariamente por el Sistema Nacional de Salud, que cubre el 97,5% de los procesos.

Entre 1990 y 2020 se registraron 4.418 defunciones por silicosis, con una mayor mortalidad entre los hombres, especialmente mayores de 60 años. Este patrón de mortalidad subraya la relevancia de mejorar las condiciones laborales y la prevención en sectores clave. Las estadísticas muestran una media de 140 defunciones anuales en hombres, con el máximo registrado en 1991 y una tendencia descendente a partir de 2000, mientras que las 68 defunciones registradas para las mujeres indican una media de 2,2 defunciones anuales, con un máximo de seis en 2004, y una tendencia ligeramente ascendente, pero no significativa.

Más investigación y un control estricto como recomendaciones

El informe incluye algunas recomendaciones para mejorar el conocimiento sobre la silicosis en España y su abordaje. En este sentido, pide considerar la prohibición de los aglomerados de cuarzo o la reglamentación más estricta del trabajo con estos materiales, que constituyen el principal sector de origen de la silicosis, siguiendo el ejemplo de otros países como Australia o California, con el fin de evitar nuevas exposiciones.

Además, aboga por seguir investigando acerca de la silicosis y de otras enfermedades laborales asociadas a la exposición a la sílice cristalina y profundizar en el estudio del impacto en las mujeres. Asimismo, sugiere extremar las medidas de vigilancia y seguimiento sobre los principales sectores productivos que están en el origen de la reemergencia, implementando controles más rigurosos. A este respecto, la jefa de Área de Salud Laboral en el Ministerio de Sanidad, Montserrat García, reclama la elaboración de un plan similar al Programa Integral de Vigilancia de la Salud de los Trabajadores Expuestos a Amianto para la población expuesta al sílice.

Entre las recomendaciones del documento de Sanidad, también destaca la extensión del reconocimiento de enfermedad profesional causada por la sílice cristalina a enfermedades inmunomediadas sistémicas, como la esclerodermia, la artritis reumatoide o el lupus, para ampliar la cobertura médica y compensatoria de los afectados por diversas patologías asociadas a esta exposición.

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