Luis Castro asume la alcaldía de San Xoán de Río esperando a ser relevado en 15 días

Cinco minutos duró el pleno de toma de posesión del nuevo alcalde de San Xoán de Río. El socialista Luis Castro se puso al frente de la Corporación en una sesión plenaria que dirigió su socio de gobierno, el nacionalista Miguel Blanco. Éste ejerciócomo alcalde en funciones durante apenas dos semanas, tras la renuncia de Darío Álvarez,

quien también dejará el puesto de concejal.

La candidatura de Luis Castro fue votada por los dos ediles del PSOE y por los otros dos del BNG, respetando los pactos alcanzados por estas dos fuerzas a nivel autonómico. A su vez, el PP presentó como candidato a Samuel Pérez, que fue tercero en la lista de las municipales, lo que obligó a renunciar a los dos ediles que le precedieron. Los tres votos de este grupo no fueron suficientes para evitar que los cuatro de socialistas y nacionalistas diesen la alcaldía a Luis Castro.

Nada más finalizar la sesión, el nuevo alcalde confirmó que ejercerá el cargo hasta que el Concello reciba las credenciales de edil de José Luis Rodríguez, quien sustituye a Darío Álvarez. Calcula que la Junta Electoral Central tardará unas dos semanas en enviar estos documentos. Después, el actual regidor volverá a ser concejal.

Luis Castro aludió a “problemas de negocios e outras cousas” para justificar la brevedad de su paso por la alcaldía. Confirmó que asume el cargo sin ningún proyecto para el Concello, pero segura que “estaremos aí” para dirigirlo.

Al pleno asistieron una decena de vecinos. También estuvieron los socialistas, Miguel Fidalgo (senador), Laura Seara (diputada autonómica) y Eladio Osorio (coordinador comarcal).

Discrepancias por el método de votación

En el pleno hubo dos votaciones, la correspondiente a la elección del nuevo alcalde y la del método de votación. En este apartado, socialistas y nacionalistas solicitaron que los concejales se posicionasen por el procedimiento ordinario, de mano alzada.

A su vez, los ediles “populares” preferían que el nuevo alcalde fuese votado con la utilización de una urna. Los cuatro votos del equipo de gobierno de PSOE y BNG superaron a los tres del PP y consiguieron que los miembros de la Corporación eligiesen al nuevo regidor con el sistema tradicional de levantar la mano.