Gimnasios en Ourense | BeOne, la familia deportiva

Septiembre es, al igual que enero, el mes de comenzar proyectos y buenos propósitos. Y, entre ellos, además del consabido aprender inglés, está el de comenzar a hacer deporte, iniciar un estilo de vida saludable incorporando actividad física a nuestra agenda diaria. Una promesa que desde hace años se viene imponiendo “por razones físicas, de estar en forma y cuidarse, y también en cierto modo psicológicas, ya que el deporte es además una forma de liberar estrés, evadirse y también de relacionarse con gente nueva”, comenta Saúl Álvarez, gerente de BeOne Eiroás. Una afirmación que viene corroborando a lo largo de su trayectoria que dio comienzo hace más de 20 años en el ámbito deportivo y que le dan tablas para afirmar que “en los últimos diez años ha crecido exponencialmente el número de personas que han incorporado el ejercicio físico a su día a día. Independientemente de su edad y sexo”.

Y si alguien lo sabe bien, esa es Leticia Ojea, que, desde la apertura del centro recibe a todo aquel que se quiere matricular y que, a continuación, visita el centro asiduamente. Ella ha recibido a miles de ourensanos y es consciente de que los centros BeOne “son una referencia para toda la ciudad. Tenemos una amplia agenda de actividades y horarios, para que todos encuentren aquel deporte y hora que mejor se ajusta a sus preferencias y necesidades”.

A la hora de la práctica deportiva, BeOne puede presumir de ser un centro que involucra a toda la familia. Para ello cuentan con una zona infantil en la que Paula del Río Arcos se encarga de preparar un sinfín de actividades para que niños desde los 4 y hasta los 14 años se lo pasen en grande mientras sus padres practican deporte. “Contamos con este servicio desde la apertura del centro, y los familiares valoran muy positivamente que sus hijos puedan estar cerca, bien atendidos, y ellos no tengan que renunciar al ejercicio físico” comenta la responsable de este espacio. Y para los niños que quieran practicar deporte, también el centro oferta una serie de actividades pensadas acordes a su edad. “Desde los seis meses pueden asistir a actividades acuáticas. Según se van haciendo mayores, los enseñamos a nadar para que se desenvuelvan con soltura en el agua desde la infancia, algo que considero esencial a modo de supervivencia, y también para disfrutar al máximo de los veranos en la playa y piscina”, comenta Emma Rodríguez, responsable del área acuática, entre otras.

Además de disfrutar de ese espacio acuático dividido en las áreas de piscina de 25 metros y un segundo vaso con apoyo musical para actividades como “pool dance” o “pool gim”, los usuarios disponen de spa y sauna húmeda y seca, “para combinar el esfuerzo físico con momentos de relax y descanso”, añade Emma.

En su afán de llegar al máximo número de personas posibles, los usuarios también disponen de un servicio de entrenador personal. “Tan solo el hecho de venir a una de nuestras salas o realizar una de las actividades propuestas, el usuario tendrá el asesoramiento del monitor. Pero, en caso de que lo necesite o prefiera, también pueden solicitar un entrenador personal que, en media o una hora, se adapta específicamente a las necesidades de cada uno”, comenta Leticia.

También programan actividades exteriores, como el running “una actividad que desarrollamos fuera del centro desde antes de la pandemia, ya que correr al aire libre aporta más que subirse a una cinta. Con el covid-19 se ha afianzado”, añade Emma Rodríguez.

Y es esa pandemia lo que ha marcado el transcurrir de los días en estos últimos años. “Veníamos de años muy buenos, con mucha actividad y mucha gente en las instalaciones y, de repente, el parón total. Lo bueno es que se ve que la gente tiene ganas de recuperar su vida y su libertad. Y venir al gimnasio forma parte de ese regreso a lo que hacíamos antes de la pandemia”. comenta Saúl Álvarez. “La referencia la marca la gente mayor, la más vulnerable. En cuanto fueron estando vacunados, tanto ellos, como la gente de alrededor fue soltándose un poco más”. Y para mantener esa seguridad, BeOne ha sabido reaccionar, y los protocolos sanitarios y los que implementa el mismo centro, hacen que la práctica del deporte sea totalmente segura. “Valoran mucho la seguridad, que nos ha preocupado desde los inicios de la pandemia. Se ha trabajado mucho, y se sigue trabajando, en limpieza y higiene. Y la gente ha respondido y se ha involucrado para cumplir con todos lo exigido”, añade Leticia. También en la zona infantil, “nos hemos adaptado, cambiando las fiestas temáticas, disfraces y juegos de más contacto, por aquellas actividades que permitan a los niños divertirse sin peligro. Cada día estamos atentos a los protocolos para adaptarnos y que los padres estén tranquilos”, comenta Paula Del Río.

El deporte, esencial

Se dice y se repite a diario: el deporte es esencial para una vida saludable. “El cuerpo es nuestra casa y, al igual que un dentista te recomienda lavar los dientes todos los días para una boca sana, hacer deporte lo es para mantenerse en forma. No hace falta marcarse pautas imposibles, con un poco cada día, continuo, veremos grandes resultados. Nos gustará y hará que querramos seguir”, comenta Marco Salvadores. “Además, nosotros también damos consejos de vida saludables sobre qué hacer para mantenerse”.

Otra de las claves para seguir una rutina en un centro deportivo, es dar con el equipo que conecta contigo. “Y a nosotros siempre nos han valorado muy bien por el personal. Somos un equipo de unas 30 personas que es como una gran familia. Esa buena sintonía se transmite a los usuarios. Ellos se sienten a gusto, cómodos, con confianza de resolver cualquier duda, saben que son bien recibidos, y eso también ayuda a mantener las rutinas”, comenta Saúl Álvarez. Una forma de que los usuarios también se sientan cómodos, no les cuesten y mantengan sus hábitos. “Entras por la puerta, en recepción te saludan amablemente, una charla, actividad deportiva, tienes tu grupo en el gimnasio, desconectas, y encima haces deporte que también ayuda en esa evasión”.

Si queda alguna duda sobre los centros y equipo del BeOne, “somos los mejores”, sentencia Paula Del Río.