¿Qué hacer ante un atragantamiento?

Olga Fernández, coordinadora de Urgencias Pediátricas de Cosaga-Recoletas

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El atragantamiento en lactantes suele ocurrir de forma rápida e inesperada, creando mucha angustia por la posibilidad de asfixia. Se produce por una obstrucción brusca de las vías respiratorias por un cuerpo extraño y al quedar bloqueadas, el bebé no puede respirar y puede llegar a perder el conocimiento. Se trata de una situación de emergencia médica que puede poner en peligro la vida del niño. Es importante saber qué hacer y que no hacer y cómo actuar ante esta situación.

¿Cómo reconocerlo?

Cuando un lactante traga algún objeto (habitualmente un juguete o trozo de comida), se desplaza a vías respiratorias y produce un acceso brusco de tos. la tos es un reflejo natural para expulsar el objeto que las obstruye.

Puede acompañarse de dificultad para hablar o respirar, afonía, palidez o color morado de los labios, o el niño puede dejar de respirar y perder el conocimiento

¿Como distinguir los tipos de tos en un atragantamiento?

Es importante conocerlas para saber el tipo de obstrucción.

  • Tos efectiva: Si es enérgica y ruidosa. Si el lactante puede llorar, hablar, toser y respirar tiene una obstrucción leve.
  • Tos inefectiva o no efectiva: Si por el contrario es apagada, silenciosa, con poco esfuerzo al toser o ausente, es incapaz de vocalizar o de respirar o cambia el color de la cara, es que el aire no llega a los pulmones y estaríamos ante una obstrucción grave.

¿Cuáles son las consecuencias?

Las consecuencias de un cuerpo extraño, cuando entra en la vía aérea, van a depender de su forma y donde esté localizado.

Los objetos grandes, redondos o que se expanden van a producir una obstrucción completa, no dejando pasar el aire, entonces el cerebro deja de recibir oxígeno y se puede producir una parada cardiorrespiratoria.

Los objetos de forma irregular permiten que pase el aire a su alrededor y la obstrucción parcial puede, en fase inicial, pasar desapercibida.

¿Qué hacer? Obstrucción parcial o leve

Si el bebé está consciente y con tos efectiva/fuerte, puede respirar, emitir sonidos o hablar, llorar y tiene buen color de labios:

  1. Colocar en posición incorporada.
  2. Estimularle para que siga tosiendo. No debemos intervenir en este momento porque la tos es un mecanismo de defensa que está intentando expulsar el cuerpo extraño y es el reflejo más eficaz para revertir la situación, por ello se debe animar a que tosa. Si se interrumpe el proceso, el objeto podría moverse y bloquear completamente las vías respiratorias.
  3. Vigilar: signos de dificultad para respirar o tragar, arcadas continuas, tos persistente, afonía o babeo.

¿Qué hacer? Obstrucción total o grave

Si el bebé está consciente pero la tos es débil o inefectiva, no es capaz de emitir sonidos, hablar, llorar o respirar y se pone azul:

  1. Pediremos ayuda inmediatamente al servicio de emergencias a través del 112.
  2. Mirar la boca y sacar el objeto con la mano (sólo si es visible y accesible, con el dedo en posición de gancho, de atrás hacia adelante por la cara interna de la mejilla).
  3. Nos sentaremos y colocaremos al bebé boca abajo sobre el antebrazo, apoyándolo sobre el muslo y sujetarlo por el mentón y la mandíbula para sostenerle la cabeza. La cabeza siempre debe de estar más baja que el cuerpo y con la mano se propician 5 golpes en la parte alta de la espalda, entre los omóplatos, con el talón de la mano. Dirigir los dedos hacia arriba para no golpear la parte trasera de la cabeza. La gravedad y los golpes en la espalda deberían eliminar la obstrucción.
  4. Si los golpes no han sido efectivos y no expulsa el objeto, con cuidado le damos la vuelta y con 2 dedos realizaremos 5 compresiones, aproximadamente un dedo por debajo de la línea de los pezones, debajo del esternón y manteniendo también la cabeza más baja, Dejar que el pecho se eleve entre cada compresión.
  5. Repetir esta secuencia (5 palmadas en la espalda y hasta 5 compresiones torácicas) hasta que el objeto sea expulsado, se despejen las vías respiratorias y el lactante pueda respirar, llorar o toser.
  6. Si deja de responder, porque haya pedido el conocimiento, pondremos al bebé sobre una superficie plana y firme (una mesa, el suelo). Se recomienda abrir la vía aérea sujetando con una mano la frente del niño y tirando ligeramente de la barbilla hacia arriba y comprobar:
  • Si respira: se ha de colocar al niño de costado, vigilando que no deje de respirar hasta que llegue el equipo de emergencias.
  • Si el bebé sigue sin conocimiento y las vías respiratorias están despejadas, pero no comienza a respirar, se iniciarían los primeros auxilios en reanimación cardiopulmonar.

¿Qué no debemos hacer?

  • No darle palmadas en la espalda. En contra de lo que se suele pensar, se deben evitar los golpes en la espalda ya que podrían mover el cuerpo extraño.
  • Nunca se meterá la mano porque se puede empeorar la situación, tampoco hay que intentar buscar el objeto con los dedos sin verlo, ni tratar de sacarlo si está tan profundo que no se pueda llegar a él, ya que podríamos introducirlo aún más. Por eso es importante mantener la calma.
  • Darle agua.

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