El COB contra el Breogán, una copa y para casa (108-75)

El COB se despidió de la Copa Galicia como era de esperar, cayendo ante un Breogán que demostró la diferencia de categoría tanto en el juego como en el físico con un equipo de la Liga ACB y que se hizo más notable con el paso de los minutos. De nuevo la “chavalada” de Moncho López fue lo mejor de un COB que tras los dos primeros partidos de la pretemporada empieza a dejar dudas en algunos de los jugadores que son clave para saber el nivel que puede tener un equipo todavía sin Rafa Lisboa y un pívot que complete la rotación.

El equipo ourensano empezó muy bien y dejó una imagen muy buena hasta el descanso, pero tras el paso por los vestuarios la diferencia con el Breogán fue enorme. Nada que ver con el partidazo de la temporada pasada en el mismo torneo, aunque ya avisaba Moncho López en la previa de que el engranaje está mucho más falto de acoplamiento que entonces.

Los problemas en el rebote defensivo ante un rival con más músculo y centímetros fueron el único debe del COB en el primer cuarto. Solo gracias a las segundas opciones se mantuvo cerca y al final por delante el Breogán. Isaac Vázquez empezó liderando el ataque ourensano y Martín Fernández tomó luego el relevo. Los dos con un desparpajo y una seguridad en el juego que ilusionan al aficionado más exigente. Martín Iglesias fue capaz de subir el nivel de Romaro Gill cada vez que estuvo en pista y Sergi Huguet anotó 6 puntos muy importantes para que la primera mitad fuese siempre igualada. Eso pese a que entre Carlos Jürgens, Kentwan Smith y Gabe Kalscheur no habían anotado un solo punto al descanso (46-36).

La segunda fue otra historia. De hecho no la tuvo. Un triple de Smith respondió el inicial del Breogán, pero en dos minutos la renta ya casi se había doblado (55-39) y el encuentro entró en otro escenario.

El Breogán empezó a divertirse jugando cada vez más fácil al contraataque y Moncho López fue probando quintetos de “grandes” y minutos para que ganaran confianza algunos jugadores que no la consiguieron. Jürgens y Kalscheur terminaron con -6 de valoración y la sensación de no tener nunca ni la inspiración ni la calidad para hacer mucho más. La llegada de Rafa Lisboa subirá el nivel del equipo, pero está claro que la progresión del COB pasa porque dos de sus fichajes más importantes lo hagan por sí solos. Para eso está la pretemporada.

El último cuarto le sobró al COB y al partido. Tiempo para detalles individuales válidos y errores para revisar de un equipo con mejor juego colectivo que sensaciones individuales en alguno de sus jugadores. El próximo rival, el Bilbao Basket no bajará el listón, pero el COB intentará llegar más conjuntado e incluso con más argumentos.