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ENTREVISTA
Dice el refrán que “a quien madruga, Dios le ayuda”. Y el COB ha vuelto a poner todo de su parte para que eso se cumpla. Se cerró la primera semana en la pretemporada de la pretemporada (la oficial arrancará el 18 de agosto) con las sesiones de trabajo que han hecho y harán sudar a la avanzadilla del primer equipo. Uno de ellos es Diogo Seixas (2004, Albufeira -Portugal-), fichaje y apuesta cobista de presente y futuro, ya que firmó un contrato por tres años. Aterrizó para darse de bruces con la ola de calor. Sobre la pista del pabellónde Pereiro de Aguiar trabaja para adaptarse a lo que le pide Moncho López, su valedor. “Estoy muy contento de como han ido estos primeros días, más contento que cansado por ahora. Son entrenamientos que sirven para ir conociendo a los compañeros, al equipo, y eso es muy importante porque nunca hemos jugado juntos. Poco a poco se va subiendo la carga de trabajo, pero estoy feliz”, explica el luso.
Su aterrizaje en el Pazo se dio por la combinación de una serie de circunstancias. Seixas quería cerrar su etapa universitaria en Estados Unidos, primero con San José State Spartans, después con Central Arkansas Bears. “Quería volver a Europa. Hubo cosas en Estados Unidos que no me gustaron, el baloncesto y lo que lo rodea es muy complicado allí. Y me iba a quedar este año en Portugal, porque tenía ganas de estar en casa después de tantos años fuera. Pero Moncho habló conmigo, me presentó el plan del COB y me encantó el proyecto. Me va a permitir tener un desarrollo competitivo en una competición muy exigente”, recuerda Seixas.
No será su primera experiencia en España. Fue un adolescente de 15 años en Sevilla defendiendo los colores del Betis, por eso ocupa ahora plaza de cupo. Alternó cantera con élite en un periodo en el que le tocó ser una esponja de conocimientos. “Me ayudó mucho. Entrenaba con el primer equipo, que estaba en la ACB. Yo iba desde Albufeira, una ciudad pequeña, y me enseñó que no era el mejor del mundo, que hay que trabajar mucho para llegar a la élite”, explica el portugués.
Asegura versatilidad. Se ha fogueado en varias posiciones. “Para la ficha de jugador diría que soy alero, sí, pero creo que soy versátil porque puedo hacer cosas diferentes con mi tamaño, cubrir varias posiciones”, detalla desde su 2’03 de altura y tras jugar partiendo más desde la zona en su etapa estadounidense.
Y quiere empezar a demostrarlo ya, cogerle el punto a la Primera FEB, y hacerlo desde la tranquilidad y la motivación que le da el respaldo del club.”Tener un contrato largo me ayuda, me da confianza, siento que el COB confía en mí. En esa situación, el jugador está más cómodo y puede centrarse solo en jugar al balocesto, en mejorar y progresar”.
Seixas no ha tenido demasiado tiempo para empezar a conocer Ourense con el Google Maps. Horas ha tenido, pero los más de 40 grados no animan a excursiones. “Lo que he visto de la ciudad y de la gente me ha parecido muy bonito. Es verdad que hablando con Moncho me dio la sensación de que era más pequeña, pero para nada. Eso sí, todavía he visto poco porque entrenamos por las mañanas, por las tardes hace demasiado calor y me acuesto pronto para trabajar al día siguiente”.
Lo dice un jugador nacido en una ciudad costera portuguesa que se ha marcado como objetivo destacar en el país vecino. Trabaja con ganas para que el futuro sea prometedor, pero sin olvidar que el presente importa y la Primera FEB no espera por nadie. Una pieza nueva del COB 25-26 que ya suda la camiseta.
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