Cartas al director

Ribadavia y su jungla de maquians

Hace unos años el Ayuntamiento de Carballeda de Avia reclamaba a Ribadavia terrenos en la parroquia de San Cristóbal, tierras que a principios del siglo pasado Ribadavia incorporó a sus dominios a petición de la mayoría de los vecinos de dicha parroquia. Muy anteriormente a estas fechas, los límites de Carballeda de Avia llegaron al regato de Maquians.

Esto me hace pensar que el abandono del que han hecho gala casi todas las corporaciones municipales de Ribadavia de las zonas del regato de Maquians, es posible sea inconsciente. Pues si no no se explica como los servicios de limpieza concluyen su trabajo al llegar a la altura del ambulatorio. En ese punto se acabó la limpieza, no importa el grupo escolar ni el instituto de Ribadavia que siguen a continuación. Seguido a estas instituciones sigue la jungla de Maquians. ¿Como decirle a la gente que en el casco urbano de una población, al lado de un colegio al que diariamente asisten niños, muchos de ellos menores de ocho años, hay una finca completamente arbolada, con la maleza tan espesa con alturas superiores al metro, impidiendo que la luz llegue al suelo? Esto mirándolo así no parece grave, pero sí lo es la fauna que mora en ese lugar, ratas. Y son ratas enormes. Hablo de ratas de más de 20 centímetros, sin incluir su precioso rabo pelado.

Esta finca es propiedad privada, pero quiero creer que el Concello tiene los argumentos y armas necesarias para que al menos los límites con el colegio y con la travesía sean desbrozados, y así mantener el suficiente margen de separación con la maleza. Lo ideal sería la limpieza de toda la parcela, pero quizá esto no se pueda conseguir, pero en manos de las autoridades está hacer lo máximo posible.

Al cruzar el regato de Maquians comienza la calle de Muñoz Calero, hoy por hoy es la principal entrada a la villa, pero sólo es principal para eso en exclusiva, pues para otras cosas no somos nadie. En distintas ocasiones se le ha solicitado a las autoridades que al menso un día o dos a la semana se proceda a la limpieza como en el resto de la villa, pero nunca se ha atendido nuestras peticiones, a pesar de que hay una cafetería de nueva apertura. Les da igual los desperdicios de colillas, papeles, etcétera. Se harán fósiles. Eso sí, será motivo de curioso estudio en épocas futuras. Las solicitudes, dos de vado permanente, después de tres años seguimos en punto muerto y sin solución.