El nuevo logo del PP ha dado para muchas bromas en las redes sociales. Normal. El caso es encontrar algo para hablar del PP.
Un logotipo en el 99% no es el logotipo, sino lo que la empresa representa, ha hecho o hace. Lo sé porque he sido diseñador gráfico y he diseñado o participado en el diseño de algunos de los logotipos más conocidos de España de los 80. Como el de la desaparecida Galerías Preciados hecho en colaboración con Massimo Vignelli; o por citar algunos gallegos el Xacobeo 93 o empresas como Tecam, Ofiprecios, Galicia Moda, Caramelo y otras.
En ocasiones, es una manía, cuando me encuentro con un chico o una chica con una prenda de Nike suelo preguntarles:
– ¿Sabes lo que significa?
– ¿El qué?
– Nike. Eso que llevas ahí, en las zapatillas.
– No.
– Es un nombre griego. Se pronuncia niké, no naik. Es la Diosa de la Victoria de los antiguos griegos. Se aparecía a los soldados en el campo de batalla para anunciarles que iban a ganar. Era una diosa alada y veloz. Por eso Nike eligió ese nombre. La velocidad y la victoria tienen mucho que ver con el deporte.
Normalmente los chavales/as se quedan algo alucinados con la explicación y mi intromisión. Aunque suele gustarles y lo agradecen.
Nike es un ejemplo de un buen logotipo. En sí mismo no significa nada. Incluso ha borrado el nombre y se ha quedado solo con el símbolo. Es la imagen de la empresa construida durante años la que genera una idea en nosotros cuando vemos su logo. En el caso de Nike la idea de la superación a través del esfuerzo: "Do it".
Un logotipo es como la firma de una persona. Si la persona es de fiar la firma es de fiar. Da igual bonita o fea, antigua o moderna. Da igual que escriba su nombre legible o con una rúbrica abstracta. Uno no cambia nada cambiando su firma.
Estos días he leido que la antigua gaviota del PP en realidad era un charrán. Muy apropiado ya que los que vivimos en ciudades costeras consideramos a las gaviotas ratas urbanas, una plaga. En cambio los charranes son pulcros, pescadores nada carroñeros. A mi siempre me gustaron los charranes. Hace años veraneaba en la playa Agrelo de Bueu y siempre había charranes patrullando la línea de marea y zambulléndose para pescar. Un espectáculo.
Los charranes recorren en su vida más de treinta veces el perímetro de la tierra. Vienen desde el Pacífico norte en verano, cruzan el Círculo Polar Ártico, bajan las costas de Europa y África, atraviesan el Círculo Polar Antártico y anidan en islas del Pacífico sur. Y en otoño regresan haciendo el mismo camino a la inversa. Todos los años. Son los mayores migradores del planeta. Los mariñeiros los llaman "golondrinas de mar".
Ojala también el PP pueda y sepa hacer "el camino a la inversa"...pero lo dudo, lo dudo, lo dudo.
