El Seixalbo acabó con una serie de cinco derrotas consecutivas tras imponerse por 1-2 al Vilariño en un partido donde la primera parte estuvo marcada por las precauciones que tomaron ambos y en la que los locales intentaron organizarse en defensa para luego buscar sorprender con balones largos. En uno de ellos Pedro tuvo su oportunidad, pero su disparo cruzado se marchó desviado.
Sin embargo, se adelantó el cuadro visitante al controlar Sanmiguel un balón cerca de la frontal del área para macharse de un central y, tras superar la salida del portero, resolver a puerta vacía para establecer el 0-1.
Animado por el gol conseguido, el Seixalbo no se conformó y pudo ampliar la ventaja. Pato estuvo a punto de sorprender desde unos 30 metros a Rodri, pero el cancerbero reaccionó desviando el balón al córner.
Pudo empatar el Vilariño, pero tras consultar con la asistenta anuló el gol de Hugo Quintairos que había controlado el balón con su mano para luego rematar a portería. La jugada fue protestada y las quejas derivaron en la expulsión del técnico Milo González y la amonestación su ayudante José Antonio Cid.
En el arranque del segundo tiempo llegó el 0-2. Rápida contra encabezada por Efrén que, tras habilitar a Sanmiguel, fue derribado en el área por Pedro. El penalti lo transformó Pato.
A partir de ahí el Seixalbo renunció a atacar y el Vilariño, con más empuje que claridad, fue arrinconando a su oponente hasta conseguir el 1-2. Diego López le hizo penalti a Hugo Quintarios y Pedro lo tradujo en gol.
Desde entonces los locales intensificaron su ataque en busca del empate, mientras el Seixalbo resistía con entereza para conservar un triunfo muy valioso.
