Según datos de la Xunta, en la provincia se concentra el 10,35% de los locales comerciales de Galicia y el 10,77% de la sala de ventas.
Ourense cuenta con más de 400.000 metros cuadrados de superficie comercial, con algo más de 3.500 establecimientos operativos, la mayoría dedicados a productos diferentes a la alimentación. De acuerdo con los datos de la Xunta, la superficie destinada a alimentación llega casi a los 140.000 metros cuadrados, mientras que la restante está en torno a los 270.000. La crisis económica ha puesto contra las cuerdas a muchos establecimientos y tampoco en estos momentos la situación permite alegrías. Sin embargo, algo está ocurriendo en el sector para que la ciudad vuelva a ser objeto de deseo, sobre todo en el centro.
En el último año casi una veintena de locales de la zona comercial han tomado el relevo y en perspectiva hay nuevas inversiones, en este caso protagonizadas por empresas foráneas. Fuentes del sector inmobiliario confirman que grandes marcas y franquicias preguntan con insistencia sobre locales libres. Decathlon es una de ellas. La multinacional que vende material deportivo, de ocio y tiempo libre lleva tiempo buscando emplazamiento en Ourense aunque no han conseguido “desafortunadamete” un lugar en el que instalar una tienda, según reconoce la propia empresa. En estos momentos tiene más de cien tiendas por toda España y sigue adelante en su proceso de expansión.
Las mismas fuentes del sector inmobiliario también confirman que los responsables de la marca han visitado varios lugares para sopesar las alternativas existentes. Buscan espacio en la capital, como lo han hecho recientemente también en el entorno urbano. En el polígono industrial de San Cibrao das Viñas han valorado la oferta de algunas parcelas libres, aunque no se han inclinado por ninguna. La declaración del asentamiento empresarial como polígono terciario permitiría la instalación de empresas comerciales, de lo que se podría aprovechar Decathlon u otras firmas.
Pero no solamente la marca de origen francés busca locales en la ciudad.
Una importante cadena de tiendas portuguesa podría cerrar los próximos días el contrato de arrendamiento de un local vacío en el centro. Previamente enseñas como Tiger, El Ganso y otras en pleno proceso de expansión han llegado al centro.
Apuestas locales
También el empresariado local está realizando su propia apuesta atendiendo a un modelo de tienda más especializada y de pequeño formato. Luis Rivera, presidente del Centro Comercial Abierto, muestra su satisfacción por ver cómo “Ourense sigue teniendo mucho interés comercial y se están abriendo muchas tiendas”. Una de ellas es Coroto´s, que se ubica en el casco histórico desde el pasado mes de marzo. Su responsable, Raquel Rodríguez, señala que le animó a invertir el hecho de desarrollar su propio proyecto comercial, basado en exposición y venta de artículos de arte o artesanía de calidad.
La necesidad de buscar una ocupación estable también empujó a José Cid a abrir a finales de julio la tienda Room Concept, dedicada a la moda joven. Reconoce que “la situación económica así lo requería porque las oportunidades laborales escasean y entonces decidimos apostar por una marca de primera línea”. Otros colegas, que abrieron sus negocios antes, lo hicieron por la misma motivación. Pablo Martínez abrió la tienda Led Cordal hace un año y señala que “después de llevar diez o quince años trabajando en el comercio decidí que era el momento de dar el paso y abrir mi propio negocio”, un ejemplo similar al que expone Diana, de la tienda María Elena, que abrió sus puertas hace tres años. Como socia del comercio explica que se animó a dar el paso “por iniciar algo nuevo porque fui empleada y decidí que quería seguir adelante ahora como socia”.
En torno a un 30 % de las empresas que se crean se vinculan al sector servicios, sobre todo hostelería y pequeño comercio.
Ese porcentaje ha seguido invariable durante la crisis y también lo es ahora en la recta final de la recesión. ¿Es un buen momento para iniciar una aventurar empresarial como comerciante? Aurelio Gómez Villar, presidente de la Federación de Comercio reconoce que “en la ciudad se están produciendo muchas aperturas, aunque hay que reconocer que alguna vuelve a cerrar porque no aguanta”. Sin embargo, pese a ese revés, señala que “no es que se esté viviendo un momento dulce para la inversión, aunque sí hay mucha gente que se está animando”. Puede favorecer la existencia de “ayudas públicas e incluso la facilidad para acceder a algunos créditos”.
Efectivamente, la Xunta y algunos concellos han establecido líneas de subvenciones a la puesta en marcha de nuevos negocios con el fin de estimular el emprendimiento, incluso el relevo generacional y la modernización de las tiendas.
Lo que sí ya es imparable es el cambio de modelo comercial, con más tiendas de pequeño formato, más especializadas, con una fuerte presencia de las franquicias. Mientras, la inversión en grandes superficies comerciales se mantiene en barbecho, cuando menos en Ourense. Aurelio Gómez Villar, cree que “el tiempo de las grandes superficies comerciales ha pasado, por lo menos para las más grandes, sobre todo porque la crisis ha obligado a muchas de estas empresas a replantear su expansión”.
