Investigadores estudian métodos para cambiar el sabor de este producto durante la fase de cultivo

Entenza, el pimiento de Padrón que no pica

 Pimientos de Padrón. (Foto: Archivo)
Investigadores gallegos ha conseguido el primer pimiento de Padrón que no pica. La variedad Entenza carece de la sustancia que provoca el picor y garantiza un bocado tranquilo. Los técnicos estudian un método para que los agricultores consigan más o menos picor en los pimientos que cultivan a través del riego, del abono, la ventilación o la maduración. Archivo Pimientos de Padrón.
Cuando María y Carmen recogen los pimientos de Padrón en el invernadero no saben con seguridad si van a picar o no. La experiencia les ayuda a identificar los picantes por la textura, la semilla o la placenta. ‘Miña nai era capaz de apartar para unha bolsa os que lle parecían picantes e para outra os dulces. Só con tocarlles xa sabía se ían picar’, explica María. ‘Levaba toda a vida apañando nos pimientos e fallaba moi poucas veces’. Pero fallaba. No distinguía con seguridad los picantes de los dulces. Esa incertidumbre contribuyó a alimentar el mito de los pimientos de Padrón, ‘unos pican y otros no’. Un mito que podría caer tras años de trabajo de selección de los técnicos del Centro de Investigaciones Agrarias de Mabegondo (CIAM) y el Centro de Formación y Experimentación Agraria de Salceda de Caselas. Sin manipulación genética, acaban de dar con la fórmula para obtener pimientos de Padrón que no pican.

‘Partiendo de diferentes líneas de pimientos de la zona, hemos realizado un proceso de selección hasta obtener plantas que no pican. Es simplemente un proceso selectivo, en el que se descartan los picantes, el que no ha llevado a esta variedad registrada con el nombre de Entenza’, indica Alfredo Taboada Arias, investigador del departamento de Producción Vegetal del CIAM.

No tan iguales

Estos pimientos son iguales a los otros, pero no pican. Los otros (Padrón comercial) pueden picar o no. Los que quieran comer sobre seguro y no arriesgar a un bocado picante pueden hacerlo gracias al trabajo desarrollado en los invernaderos de Mabegondo y Salceda de Caselas. ‘Duplicamos los trabajos que realizamos con las plantas para obtener información en dos zonas distintas. Las condiciones climáticas del norte de la provincia de A Coruña son muy diferentes a las del sur de Pontevedra. Es una forma de obtener más datos y la experiencia nos ha valido para comprobar que los pimientos entran antes en producción en Salceda de Caselas y que la cosecha se alarga más en el sur de la comunidad’.

No son investigadores de laboratorio, bata blanca y tubo de ensayo. Pasan muchas más horas en los invernaderos para poder identificar los agentes que influyen en el grado de picor de los pimientos. ‘Inciden factores agronómicos y factores fisiológicos de la propia planta’, según Alfredo Taboada. ‘El manejo incorrecto de un cultivo puede provocar que las variedades que no deberían picar demasiado produzcan pimientos picantes. Cualquier estrés que se pueda producir, motivado por falta de agua o enfermedades, también puede provocar un incremento del picor, aunque no siempre sea así’.

Cuando los echemos a la sartén ya sabremos a que nos exponemos, y cuando los llevemos a la boca también podremos evitar la ruleta rusa. Para quienes le gustan las cosas de siempre, seguirá habiendo los tradicionales pimientos de Padrón, de los que pican y de los que no.

‘No van a perder la gracia. Que haya pimientos que no piquen no significa que no haya de los otros pimientos, van a seguir plantándose. La variedad Entenza es una posibilidad más de comercialización y una opción para que los productores puedan elegir que pimiento quieren cultivar’, indica Taboada Arias. ‘La incertidumbre sobre su picor se mantendrá, porque en el supermercado encontraremos bolsas con algunos pimientos que piquen y otros que no. El mercado también demanda otro tipo de productos y hay que estar preparados para ofrecérselos; los pimientos que no pican estarán a disposición del consumidor’.

Superado el reto de Padrón, los técnicos trabajan en la eliminación de la pungencia en la variedad lucense de Mougán. Paralelamente, el equipo investigador pretende definir los diferentes pimientos gallegos en función del nivel de capsicinoides, la sustancia responsable del picor, y poner a disposición del agricultor un método que le permita conocer si sus plantas van a generar, o no, pimientos picantes. De no ser excesivos los niveles, podrían adoptar a tiempo las medidas necesarias: cambios en el riego, abono, ventilación adecuada o recogida en una fase temprana de maduración.

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