Lucha contra el coronavirus

Última hora coronavirus | Vuelven los controles a la frontera entre Ourense y Portugal

La policía portuguesa pide, desde este miércoles, el certificado de vacunación para cruzar al país vecino

La imagen de los controles policiales que se acostumbraban a ver durante los meses posteriores al confinamiento -y que generaron grandes quejas- vuelve a ser una realidad en los pasos fronterizos de Ourense. La frontera entre España y Portugal ya está controlada, de nuevo, por la Guardia Nacional Republicana (GNR), quienes desde las 00,00 horas de este miércoles vigilan el paso en las fronteras.

Concretamente, en la de Feces de Abaixo y Vila Verde da Raia los agentes portugueses están realizando controles aleatorios a los vehículos que quieren entrar en el país luso. Este miércoles, el sargento Rodrigues explicaba que esto se debe “a unhas novas regras que entraron en vigor este 1 de decembro, e que se prolongarán ata xaneiro, polo que durante todo decembro haberá controis diarios aquí”.

Con el refuerzo de la seguridad en Portugal, aquellos que quieran pasar al país vecino deberán presentar el certificado de vacunación -con la pauta completa-. Un simple papel que se ha convertido en un pasaporte imprescindible en la actualidad. Allí, a dos pasos de Vila Verde da Raia, todos los transeúntes llegaron acompañados de su particular billete de entrada a Portugal. “É só un papeliño”, apuntaba un vecino verinés que sorteó el control, sin darle más importancia a que los agentes de la GNR le dieran el alto.

Visitas frecuentes

Verineses, vecinos de la comarca y mismo, gente de Portugal, cruzaron la frontera tranquilos. Uno de ellos contaba que se acerca a Portugal frecuentemente: “Eu normalmente veño aquí cada pouco, teño todo en regra así que non hai problema, mentres poida vir virei, e se teño que quedar na casa pois haberá que respetalo”.

Como él, los que ayer decidieron acceder a Portugal por Chaves, no se vieron afectados por la petición del Gobierno luso de pedir el certificado de vacunación. Sí es cierto que en un primer momento saltó la alarma entre los vecinos de Ourense, pensando que sería necesario presentar un test negativo de covid-19, pero finalmente, al concretarse que solo sería necesario el certificado de las vacunas, volvió la calma a los pueblos fronterizos, quienes viven acostumbrados a la libre circulación.

Así, el primer día -“de moitos”, bromeaban los agentes-, en el que la policía portuguesa vigila las fronteras transcurrió con normalidad, sin incidencias y sin atascos. El tráfico fue moderado -en Chaves era día festivo, a lo que los agentes de la GNR achacaron la escasez de movimiento- y los ocupantes de los vehículos restaron importancia a la situación: “Se estamos vacunados, non hai impedimentos para ir a Chaves, esperemos que non vaia a máis”, señalaba un raiano, con esperanza de que no se intensifiquen las restricciones.

Ahora, una vez más, aquellos que acostumbran a cruzar la Raia deberán volver a habituarse a ver a la policía lusa en la frontera, por lo menos durante un mes, con una petición: mostrar el “pasaporte covid”.

Nuevas normas en Portugal

El Gobierno de Portugal ha aclarado las condiciones en las que se podrá entrar desde España en su territorio por sus fronteras terrestres, y ha matizado que podrán hacerlo aquellas personas que dispongan de pasaporte COVID de la UE, es decir, que acrediten la pauta completa de vacunación, una prueba negativa o haber pasado la enfermedad.

Así lo han aclarado, a través de un "despacho" publicado en el Diario de la República, el Ministerio de Administración Interna, el Ministerio de Salud y la Secretaría de Estado de Asuntos Europeos. Según precisa este documento, todos los ciudadanos que pretendan entrar en Portugal por sus fronteras terrestres -lo que incluye también a los trabajadores transfronterizos- deberán ser portadores de ese certificado. Son claros: “Sin él no pueden pasar”, concluyó el sargento Rodrigues.

Te puede interesar