La limpieza y conservación del tramo urbano del río Támega en Verín acaba de finalizar. Así lo explican desde el Concello, que estuvieron estos días atrás trabajando en las zonas situadas entre el puente de Verín y el de Pazos.
Las actuaciones realizadas tienen por objetivo lograr las medidas de protección necesarias en el lecho del río Támega para su conservación y mantenimiento, con la finalidad de prevenir futuros problemas de crecidas invernales y consolidar un caudal mínimo continuo a lo largo del tramo urbano del río, a su paso por la villa.
Así, los trabajos consistieron en la limpieza y roza selectiva, utilizando tratamientos silvícolas, los que favorecen al crecimiento de las especies que forman el bosque de ribera, de ambos márgenes del tramo urbano que engloba desde la represa de la zona del Olivar hasta el puente de Melo, así como en la retirada selectiva de sedimentos en las zonas necesarias.
Esta actuación se ejecutó tras recibir la pertinente autorización por parte de la Confederación Hidrográfica del Duero, en al que se especifica que "no causa prejuicio la integridad del espacio, no afecta de forma significativa a los hábitats prioritarios o a núcleos poblacionales de las especies de interés para la conservación o elementos del paisaje que revistan una importancia fundamental para los componentes de la biodiversidad".
Gerardo Seoane, alcalde de Verín, explica que "esta é unha actuación máis das que vimos realizando dende o Concello, previa autorización da Confederación, en zonas onde a acumulación de grava, broza e suciedade converten certas zonas do leito do río Támega en puntos de perigo de inundación".
