El Entroido es motivo de fiesta en Ourense, y así se vive cada año, una gran cita que tiene su cara B. La Policía Local desplegó un amplio dispositivo durante toda la noche del lunes, de cara a evitar incidentes graves y atender a los asistentes.
Lo más significativo fue el ingreso en estado grave en el CHUO de una joven, procedente de Santiago de Compostela, a la que hubo que intubar como consecuencia del grave estado en el que fue trasladada.
Bolsas de bebida
El balance policial de las intervenciones realizadas durante la noche del pasado lunes demuestra un alto consumo de alcohol, también entre los menores de edad. En total, se efectuaron 18 traslados a centros sanitarios, casi todos por intoxicaciones etílicas.
Pocas peleas
Pese al consumo de alcohol, los numerosos traslados entre distintos puntos de la ciudad y la cantidad de personas que salieron a disfrutar de la noche del lunes de Entroido, las autoridades señalan un dato positivo: no se registró ningún accidente de tráfico.
En cuanto a casos de agresiones o peleas en las calles, tan solo se realizaron dos intervenciones, en las que no se registraron denuncias por parte de los implicados y tampoco se reportaron lesiones.
Más allá de estas actuaciones, se expulsó a una persona de la Praza Maior que estaba empujando y alterando el orden, por lo que fue denunciado.
El ruido
Algunas personas se tomaron a broma la presencia de un hombre pertrechado con un maletín y un micrófono en alto. Se trataba de un técnico municipal que se encontraba realizando mediciones del ruido en las calles.
La Asociación O Cimborrio, había interpuesto una denuncia por el ruido. Las actuaciones de Plaza Mayor, del Progreso y de los DJ previstos en la programación finalizaron a las tres en punto, para dar cumplimiento al auto judicial que así lo ordenaba. Las conclusiones de las mediciones de posible contaminación acústica no se han hecho públicas, por el momento.
