La médica que anteayer protagonizó varias discusiones agresivas con pacientes en la sala de espera de la unidad de Rehabilitación del hospital de Piñor ha sido apartada de sus funciones. Así lo comunicó ayer el Sergas, que indicó que, al menos de forma temporal, no trabajará en este servicio. La facultativa, que ayer acudió por última vez a la consulta, no quiso hacer declaraciones sobre su comportamiento.
Investigación
La investigación de lo ocurrido continúa por parte de la dirección del área sanitaria ourensana. Mientras, los principales afectados presentarán una denuncia la próxima semana, que se suma a las reclamaciones que otros decidieron poner en el propio hospital.
A última hora de la mañana del jueves, varios pacientes esperaban para ser atendidos en el pasillo. Uno de ellos preguntó cuándo sería su turno y una fuerte discusión se desató en esta unidad. Al ver lo que estaba ocurriendo, Adrián Delgado, otro paciente, intervino para tratar de mediar. El hombre padece un cáncer y una distrofia muscular que le obliga a moverse en silla de ruedas. Se colocó frente a la sanitaria y recibió, él también, algunos gritos. La situación estaba fuera de control y la médica le impedía el paso por más que él trataba de avanzar.
Según este afectado, las enfermeras allí presentes y otros pacientes habituales, explicaron que no es la primera vez que se vive una situación de este tipo en las consultas.
Reacciones
Las reacciones no se hicieron esperar en las redes sociales de La Región. “Es una situación que se repite diariamente, no sé cómo no trascendió antes”, escribió una usuaria. Otra mujer señaló que vivió algo parecido a principios de mes: “Salí llorando de la consulta”, recordó. “Pues a mí me atendió la semana pasada y no tengo nada malo que decir de ella, me atendió correctamente”, dice otra.
También aportaron su testimonio quienes vivieron los hechos: “Fun a rehabilitación. Oíanse os berros dende fóra. É incomprensible que estes problemas sucedan diante de pacientes, compañeiros de profesión e nenos. Habería que solucionalo nun despacho. Cheguei ás 12,15 horas e xa levaban tempo, e seguiron ata a unha”. Otra mujer advierte haber vivido un panorama similar: “Yo fui víctima psicológica de esta doctora. Estuvo una hora gritándome, me echó de la consulta tres veces. No me dejaba hablar, yo intentaba decir dónde me dolía y ella solo decía -gritando- quién era el médico. Cuando salí de allí, el personal sanitario, incluida su ayudante, me dijeron que cubriera la hoja de reclamaciones, fue horrible”, explica.
Esta situación en el hospital de Piñor se suma al problema de las largas listas de espera para ser atendido en Rehabilitación, que en este momento es la especialidad más colapsada, con una espera de más de 230 días.
