La venta de vivienda descenció en el tercer trimestre del año en Ourense, según los últimos datos publicados por el Colegio de Registradores. En este periodo se realizaron 689 transacciones en la provincia, un 26% menos que en el mismo trimestre de 2007. La disminución de ventas se agudiza en el segmento de pisos usados.
La caída de las ventas de vivienda continúa afectando especialmente al segmento de los inmuebles usados, según muestran los datos del Colegio de Registradores relativos al tercer trimestre de 2008.
En este periodo se vendieron 689 viviendas en la provincia, lo que supone un descenso del 18% con respecto al trimestre precedente y del 26% sobre la misma etapa del año anterior. Manteniendo la tendencia que se registra ya desde finales de 2006, la mayoría de las transacciones corresponden a vivienda nueva (452, el 66% del total), frente a la usada (237, el 34%). No obstante, antes la mayoría de las ventas correspondían a propiedades de segunda mano (de hecho, en 2004 fueron el 70%).
Los agentes inmobiliarios explican que la venta de vivienda nueva se sostiene por la inscripción de pisos adquiridos hace unos dos años sobre plano, mientras la usada registra una gran caída, aunque en este segmento hay compradores interesados, entre ellos inversores a la espera de un chollo por si los propietarios se ven obligados a vender con urgencia al no poder pagar la hipoteca.
En este periodo se vendieron 689 viviendas en la provincia, lo que supone un descenso del 18% con respecto al trimestre precedente y del 26% sobre la misma etapa del año anterior. Manteniendo la tendencia que se registra ya desde finales de 2006, la mayoría de las transacciones corresponden a vivienda nueva (452, el 66% del total), frente a la usada (237, el 34%). No obstante, antes la mayoría de las ventas correspondían a propiedades de segunda mano (de hecho, en 2004 fueron el 70%).
Los agentes inmobiliarios explican que la venta de vivienda nueva se sostiene por la inscripción de pisos adquiridos hace unos dos años sobre plano, mientras la usada registra una gran caída, aunque en este segmento hay compradores interesados, entre ellos inversores a la espera de un chollo por si los propietarios se ven obligados a vender con urgencia al no poder pagar la hipoteca.
