Los precios de los carburantes vuelven a máximos históricos en pleno mes de agosto y coincidiendo con fechas de numerosos desplazamientos vacacionales.
Así, el gasóleo se comercializaba ayer en la mayoría de estaciones de servicio de la provincia a 1,408 euros por litro, superando así el anterior récord, de 1,399 euros, alcanzado el 19 de marzo. De hecho, de las 102 gasolineras ourensanas que venden este carburante, en 65 se superaba ya el anterior máximo de marzo. Además, es el combustible más utilizado en la provincia, ya que el 60% del parque automovilístico ourensano emplea este carburante, si bien estos vehículos registran un nivel de utilización mayor, lo que hace que el consumo de diésel represente el 75% del total.
También la gasolina de 95 octanos registra precios máximos, alcanzando una media de 1,505 en la provincia. Este carburante había registrado su anterior récord en abril, a 1,499 euros por litro. Este precio era superado ayer en Ourense por 58 de las 90 estaciones de servicio que lo venden.
Así las cosas, llenar un vehículo medio (un depósito de 55 litros) supone un desembolso de 77,44 euros en el caso de emplear diésel y 82,77 para los que utilizan gasolina. El incremento continuo de precios hace que el gasto se haya incrementado en seis euros por depósito desde el principio del verano.
Encargados de las estaciones de servicio reconocen que 'el precio está alto y cuesta mucho llenar el depósito', si bien defienden que los precios vienen determinados por las compañías distribuidoras y las gasolineras tienen un muy escaso margen de actuación.
En este sentido, el Ministerio de Industria ofrece un registro actualizado de los precios en todas las estaciones de servicio, que permite conocer dónde se vende el carburante más barato. Según los datos de ayer, en la provincia existía una diferencia de ocho céntimos por litro de gasóleo entre la estación de servicio más económica y la más cara, y de diez céntimos en el caso de la gasolina. No obstante, las estaciones que venden más barato constituyen una excepción, ya que la mayoría se alinean con precios en torno a los máximos.
MENOS CONSUMO
Ante la escalada de precios, el consumo de carburantes ha caído un 10% en la provincia con motivo de la crisis, comparando los datos de 2011 con 2008 que ofrece la Corporación de Reservas Petrolíferas (organismo vinculado al Ministerio de Industria). En lo que va de año, el consumo también se ha ralentizado. Así, los últimos datos disponibles, correspondientes al mes de mayo, muestran que se consumieron en Ourense 12.574 toneladas de gasóleo, frente a las 13.903 del mismo periodo del año pasado. La gasolina de 95 octanos expendida ese mes fue de 2.419 toneladas -unas 200 menos que en mayor de 2011- y la de 98 octanos bajó a 196 toneladas (cuando el mismo mes del año anterior habían sido 210). 'El consumo está retraído', constata Ana Noguerol, de la gasolinera de O Pino, apuntando que es el colectivo de profesionales del transporte donde más notan el descenso de actividad. En todo caso, el bajón no sólo afecta a los carburantes. 'También hay mucho menos movimiento en la tienda o en el lavado', indica.
También la gasolina de 95 octanos registra precios máximos, alcanzando una media de 1,505 en la provincia. Este carburante había registrado su anterior récord en abril, a 1,499 euros por litro. Este precio era superado ayer en Ourense por 58 de las 90 estaciones de servicio que lo venden.
Así las cosas, llenar un vehículo medio (un depósito de 55 litros) supone un desembolso de 77,44 euros en el caso de emplear diésel y 82,77 para los que utilizan gasolina. El incremento continuo de precios hace que el gasto se haya incrementado en seis euros por depósito desde el principio del verano.
Encargados de las estaciones de servicio reconocen que 'el precio está alto y cuesta mucho llenar el depósito', si bien defienden que los precios vienen determinados por las compañías distribuidoras y las gasolineras tienen un muy escaso margen de actuación.
En este sentido, el Ministerio de Industria ofrece un registro actualizado de los precios en todas las estaciones de servicio, que permite conocer dónde se vende el carburante más barato. Según los datos de ayer, en la provincia existía una diferencia de ocho céntimos por litro de gasóleo entre la estación de servicio más económica y la más cara, y de diez céntimos en el caso de la gasolina. No obstante, las estaciones que venden más barato constituyen una excepción, ya que la mayoría se alinean con precios en torno a los máximos.
MENOS CONSUMO
Ante la escalada de precios, el consumo de carburantes ha caído un 10% en la provincia con motivo de la crisis, comparando los datos de 2011 con 2008 que ofrece la Corporación de Reservas Petrolíferas (organismo vinculado al Ministerio de Industria). En lo que va de año, el consumo también se ha ralentizado. Así, los últimos datos disponibles, correspondientes al mes de mayo, muestran que se consumieron en Ourense 12.574 toneladas de gasóleo, frente a las 13.903 del mismo periodo del año pasado. La gasolina de 95 octanos expendida ese mes fue de 2.419 toneladas -unas 200 menos que en mayor de 2011- y la de 98 octanos bajó a 196 toneladas (cuando el mismo mes del año anterior habían sido 210). 'El consumo está retraído', constata Ana Noguerol, de la gasolinera de O Pino, apuntando que es el colectivo de profesionales del transporte donde más notan el descenso de actividad. En todo caso, el bajón no sólo afecta a los carburantes. 'También hay mucho menos movimiento en la tienda o en el lavado', indica.
