A Cidadella, un escondite natural en Vilardevós

photo_camera A Cidadella, en Vilardevós. (Fotos: Miguel Ángel).

La ruta Terra de Arriba alberga esta área recreativa, en Vilardevós, un paraje “único y espectacular” con frondosa vegetación, numerosas pozas para refrescarse y una cascada de 30 metros de longitud. Un lugar entre dos países, en la ruta do Contrabando

Una impresionante cascada de 30 metros, mucha vegetación e infinitas pozas en las que refrescarse con un paisaje único. Todo entre dos países, en la Raia. Es A Cidadella, un paraje en Soutochao (Vilardevós) que forma parte de la ruta Terra de Arriba, enmarcada en la ruta do Contrabando. 

Aunque Ourense dispone de muchas rutas de senderismo por descubrir, este lugar es el tesoro de Vilardevós, concello que presume de su patrimonio etnográfico y natural. Para ello, tratan de acondicionarlo año tras año para que todas las zonas sean accesibles. Muestra de ello es el trabajo de los alumnos de jardinería de los obradoiros de empleo, que tratan de poner “a punto” la zona de cara a verano, pues A Cidadella es una de las mejores opciones de la comarca para pasar los días calurosos y soleados.

Con una longitud total de 13,7 kilómetros, la ruta Terra de Arriba transcurre, de manera circular, por la aldea de Soutochao, el área recreativa de A Cidadella, el núcleo de Tomonte, el de Berrande y el de A Trave, para volver a Soutochao. En todas las aldeas hay lugares de interés para visitar, como es el caso de la Iglesia de San Bartolomeu de Berrande. Este recorrido se puede reducir al área recreativa de A Cidadella, el punto más atractivo y “espectacular” -según los vecinos y visitantes- de la localidad de Vilardevós. 

Este escondite natural tiene esencia propia. Las pasarelas que guían el camino transcurren al lado de un río y a lo largo de unos dos kilómetros se pueden encontrar merenderos, antiguos molinos, pozas únicas para refrescarse en verano y, sin duda, lo más impresionante de A Cidadella: su majestuosa cascada, encajada en plena Serra de Penas Libres. Esta se puede apreciar desde la parte baja, a la que se accede bajando unas escaleras, o desde varios miradores que ofrecen una panorámica brillante del paisaje en el que se esconde A Cidadella.

Así, Vilardevós alberga un entorno “virgen”, en el que los ruidos de las villas quedan a un lado para sumergirse en un paraje en el que el correr del agua y el cantar de los pájaros toman A Cidadella. 

Te puede interesar