El Concello de Ourense alcanza ya los cuatro meses de retraso medio en el pago de facturas (1119,41 días) y ya tiene el periodo de pago a proveedores más alto desde que Gonzalo Pérez Jácome llegó al poder. Según el informe sobre el periodo de pago a proveedores del mes de julio, que firma la tesorera, María Belén Rodríguez Tourón, y al que ha tenido acceso este periódico, la morosidad del Concello alcanza cifras nunca antes vista (solo en el verano de 2020, con motivo de la pandemia, se superaron estos 120 días de forma transitoria). Ourense ya adelanta a Santiago de Compostela y se convierte en la urbe más morosa de Galicia.
Según el informe de tesorería, el Concello de Ourense tiene una demora en el pago de facturas de 120 días (el máximo legal es de 30 días), cuadriplicando el tiempo máximo que exige la ley. Por su parte, el Consello Municipal de Deportes tarda 95,8 días de media en abonar sus pagos a los proveedores. Con estos datos, la media de facturas impagadas del conjunto de la administración local se sitúa en 119,41 jornadas de demora, acumulando un total de 5,63 millones de impagos.
Con esta cifra, ya supera el máximo alcanzado en el mandato 2015-2019 cuando gobernaba el PP de Jesús Vázquez, cuyo retraso máximo para pagar facturas llegó a un pico de 119,15 días en septiembre de 2018.
Precisamente, en junio de 2018, Jácome había llamado “pufero” al entonces alcalde por no pagar a proveedores, justo después de tener conocimiento del informe de tesorería de junio de ese año en el que el periodo de pago medio de facturas se situaba en 60 días. Dos meses después, llegaba a 119,15 días y Jácome volvía a cargar contra el regidor. Ahora, Jácome ha conseguido batir estas cifras con el bastón demando. “Eres un pufero, paga lo que debes”, insistía entonces Jácome a su predecesor.
Hoy, el Concello que dirige el líder de Democracia Ourensana ha conseguido situar en cuatro meses el periodo medio de pago de facturas. En los últimos meses los retrasos se han disparado. En mayo el impago medio era de 66,7 días, casi la mitad que ahora.
Posible cese
De momento, según informan algunas fuentes municipales, una de las soluciones que el alcalde plantea para tapar la mala gestión es cesar de su puesto a la tesorera municipal, que está en comisión de servicio, encargada de realizar estos informes en los que se pone negro sobre blanco el nivel de morosidad al que ha llegado el Concello.
Jácome, en 2018, cuando se tardaba menos: “Son cuentas, y lo demás, cuentos”
Quién mejor que el propio Jácome para definir la situación del retraso en el pago de facturas del Concello. Para ello, rescatamos sus palabras cuando lideraba la oposición y en septiembre de 2018, cuando el gobierno de Jesús Vázquez alcanzaba 119 días en el pago a proveedores, decía esto en rueda de prensa:
“Estos son cuentas, y lo demás cuentos. Esta es la gestión del alcalde de Ourense Jesús Vázquez, y, como siempre, lo medible no es opinable, en una gestión interna en la que nada tiene que ver la oposición. Nunca, desde que hay constancia, el retraso en el pago a proveedores había llegado a estos niveles. Empresas y autónomos que han suministrado o prestado un servicio al Concello ven como sus facturas tardan cada vez más en ser atendidas, con el consiguiente trastorno que ello ocasiona. Aprobada la liquidación, asistimos alarmados al hecho de que no solo no se corrige el problema sino que ha superado la cifra de los 100 días con 8,5 millones de euros en operaciones pendientes de pago, según informa Tesorería Municipal. Una triste marca más que ha superado el gobierno de Jesús Vázquez”.
