El 8 de mayo de 2015, Aniceto Rodríguez entró a la habitación 411 del CHUO y le asestó dos puñaladas a Isabel Fuentes, mientras estaba dormida, con un cuchillo de cocina de 17 centímetros
Casi dos años después, el asesinato de Isabel Fuentes en el CHUO a manos de su marido, Aniceto Rodríguez, espera una resolución judicial a la que el fiscal pide 39 años de prisión.
El escrito judicial describe con detalle los hechos que comenzaron el 1 de abril de 2015. El acusado y su mujer regresaban a su domicilio en Pazos-Verín con su esposa, con la que se había casado en segundas nupcias años atrás. Aniceto Rodríguez aprovechó que Isabel Fuente se había dormido en el sofá y le golpeó con un martillo "con ánimo de acabar con su vida".
El hombre se dispuso a aparentar que habían sido víctimas de un robo en el inmueble. Desordenó la cocina, rompió el cristal de una ventana y deshizo del arma con la que propinó el golpe a Isabel Fuentes. La mujer fue trasladada al Complejo Hospitalario de Ourense donde permaneció hasta el 29 de abril, en la habitación 417.
De una agresión a un asesinato
Durante las primeras horas del 8 de mayo de 2015, Aniceto Rodríguez aprovechó que Isabel Fuentes y la compañera de habitación de la víctima estaba dormida, entró y le asestó dos puñaladas con un cuchillo de cocina de 17 centímetros. Las dos en el tórax.
El acusado se autolesionó en el abdomen, en el brazo izquierdo y en el cuello cuando fue aprendido por un agente de seguridad. El agresor permaneció hospitalizado y se le comunicó su detención cuando recuperó la consciencia.
