El mal estado de las infraestructuras municipales (carreteras, autobuses, edificios) sigue pasando factura a las arcas públicas. El Concello de Ourense acaba de hacer frente -por sentencia judicial- el pasado 2 de febrero a un pago de 12.685,90 euros a un vecino que se cayó, causándose una lesión, en el parque Angelita Paradela de la urbanización de Penarredonda, en Novo Barrocás. Una semana después, el 9 de febrero, y sin necesidad de llegar a juicio, el gobierno local reconocía a un vecino una indemnización de 727,22 euros para pagar los arreglos del coche, dañado por una “fochanca” de la avenida de Portugal.
Solo en los últimos dos meses el Concello ha recibido notificaciones judiciales de más de 150.000 euros de petición de indemnizaciones por caídas en calles, autobuses o dependencias municipales, así como daños en coches. El Concello deberá ir a juicio este año por la reclamación de un vecino, que pide 13.336,44 euros por lesionarse debido al mal estado de las losetas en rúa Ervedelo, y también por otras caídas (no se ha cuantificado la indemnización) en rúa de Progreso, parque de O Couto y Cabeza de Vaca. Además, deberá comparecer por otra petición de 19.235,95 euros al tropezar en las losetas de la rúa Cabeza de Manzaneda número 14. Un vecino pide 1.041 euros de indemnización por una caída en rúa Lagoas; otro, 3.268,4 euros en el parque de la rúa río Mao; un tercero reclama al Concello 7.027 euros por una caída en la rúa do Paseo, y hay otra petición de 8.199,95 euros por una lesión en la rúa Río Camba, a la altura del número 6.
Estas reclamaciones no se ciñen a los peatones. Un conductor ha llevado a juicio al Concello por daños en su vehículo en la rúa dos Ponxos, pidiendo 512 euros para costear los arreglos. Pero las cantidades más grandes se dan en el caso en el que un vecino exige 91.803,45 euros de indemnización por caerse en las dependencias del servicio de Axuda no Fogar. Por último, un usuario del autobús urbano reclama 12.133 por caerse en el interior en pleno trayecto, y el caso también acaba de ser admitido por el juez.
