Dos personas fueron detenidas y otra identificada durante una brutal pelea ocurrida la madrugada de ayer en el barrio de O Couto. Eran las 0,25 horas de la madrugada cuando algunos vecinos de la calle Monseñor Álvarez González escucharon gritos y forcejeos en la calzada. Tres hombres peleaban: dos se agarraban en el suelo y trataban de agredir, y un tercero apuntaba con un revólver falso a uno de ellos.
En ese momento, intervino para alertar a uno de ellos: “Noel, lo vas a matar, para”, pero fue este último a quien terminaron noqueando. Le levantó la cabeza y se la estampó contra el suelo. Luego, junto al de la pistola, continuaron asestándole varias patadas hasta que quedó completamente sin conocimiento.
Entre los testigos del suceso estaba uno de los coordinadores del grupo de actuación de la Policía Nacional que se encontraba fuera de servicio. Salió al balcón y observó la pelea e inmediatamente dio aviso a los servicios de emergencia.
Mientras, bajó a la calle para tratar de intervenir. En ese momento, uno de ellos huyó dirección a la plaza do Couto y otro hacia la calle Ervedelo. El agente nacional indicó a la Policía Local, que acababa de llegar al lugar, el paradero de ambos sospechosos y, mientras, corrió detrás de uno para darle el alto. Lo alcanzó y lo retuvo hasta que se lo llevaron detenido.
Por otra parte, el herido permanecía en el suelo. Un testigo acudió a auxiliarle mientras llegaba la ambulancia. La víctima tiene 35 años y es vecino de Ourense. Fue trasladada al Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO) donde permanece herido grave. Según señalan fuentes de la Policía Nacional, las heridas de mayor consideración fueron las que le provocaron con el arma en la cabeza, al parecer, con la culata de la misma.
Durante el día de ayer, varios agentes del Cuerpo Nacional de Policía recorrieron la calle en la que ocurrió la pelea para tratar de hallar el arma, que ya no poseían los implicados en el momento de la detención. Al parecer, pudieron haberla escondido pero los agentes, según indicaron, contaban con pistas sobre su paradero.
Los delitos de lesiones y riñas tumultuaria ocurridos desde enero hasta septiembre de este año en la provincia ya son un 27% que en el mismo período del año anterior. Durante los tres primeros trimestres de 2022 se registraron 90 delitos de este tipo mientras que en 2021 fueron 71. Además, es el dato más alto en cuanto a este delito y en este tiempo de los últimos seis años.
Por otra parte, en la ciudad el aumento es paralelo. Las lesiones, las peleas, en definitiva, las riñas tumultuarias, son este año un 26,5% más frecuentes que en 2021. Desde enero a septiembre se contabilizaron 43 delitos de esta tipología, nueve más que el año anterior.
Las peleas grupales y otras en las que se emplearon armas preocuparon especialmente a las autoridades durante el primer trimestre de este año. En febrero, en cuestión de pocas semanas, se sucedieron dos de las peleas de mayor envergadura del año. El día 5, dos bandas urbanas -una latina y otra de jóvenes de O Vinteún y A Valenzá- se citaron en los Vinos para pelear. Una mujer cogió una botella abandonada en un bordillo, la reventó contra la pared y corrió hacia otro chico para clavarle los restos. La víctima resultó herida grave. Otro joven también fue hospitalizado tras recibir un botellazo en la cabeza. En ese mismo sitio, semanas atrás, otro joven fue trasladado en ambulancia tras recibir patadas en la cabeza.
Desde este momento, los conflictos entre bandas o los ajustes de cuentas continuaron de forma salvaje: a principios de abril un joven recibió una puñalada en el intestino y en el tórax que puso su vida en peligro. Esa misma noche fue trasladado al PAC de la calle Concejo -por sus propios amigos porque la ambulancia no pudo llegar- y más tarde al CHUO donde fue sometido a una cirugía de urgencia.
En octubre continuaron los conflictos graves, la Policía Nacional intervino en dos multitudinarias reyertas entre grupos en la plaza del Corregidor, en la calle San Pedro y en Cabeza de Manzaneda. Incautaron cuchillos de cocina.
