Dos vecinos de la ciudad, oriundos de Marruecos , Hamed B., de 30 años, y Abderramán O., de 33, fueron detenidos como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas. El arresto se produjo a las 20.30 horas del pasado viernes cuando ambos hombres se encontraban en el interior del bar en que trabaja uno de ellos, situado en la calle Doctor Peña Rey (Mariñamansa). El local estaba siendo vigilado desde hace dos meses ante la sospecha de que estaba siendo utilizado para introducir hachís en la ciudad.
El viernes, los agentes, al igual que en jornadas anteriores, establecieron un amplio dispositivo en los exteriores del local y, cuando se disponían a entrar al interior, los dos detenidos, al percatarse de la presencia policial, arrojaron un bulto por una ventana trasera del establecimiento, cayendo sobre un patio de luces de difícil acceso.
Las patrullas cerraron el establecimiento hasta que recuperaron el paquete, que contenía 100 gramos de hachís. Acto seguido procedieron al arresto de los dos hombres, a los que, además intervinieron 720 euros en diferentes billetes y tres 'bellotas' de acero, que, según dio a conocer la Comisaría, se utilizan para transportar droga en los intestinos.
Los arrestados negaron que arrojaran ningún bulto por la ventana del bar y que la sustancia estupefaciente decomisada fuera de su propiedad. Además, alegaron que el dinero intervenido procedía de la recaudación diaria en el local y de la venta ambulante de objetos en las calles de la ciudad.
La Policía registró todo el local ante la sospecha de que escondía más droga (sospechaban que habían recibido estos días un alijo) pero no la encontraron. Los dos arrestados prestaron declaración en la mañana del sábado ante el titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Ourense y quedaron en libertad con cargos.
Las patrullas cerraron el establecimiento hasta que recuperaron el paquete, que contenía 100 gramos de hachís. Acto seguido procedieron al arresto de los dos hombres, a los que, además intervinieron 720 euros en diferentes billetes y tres 'bellotas' de acero, que, según dio a conocer la Comisaría, se utilizan para transportar droga en los intestinos.
Los arrestados negaron que arrojaran ningún bulto por la ventana del bar y que la sustancia estupefaciente decomisada fuera de su propiedad. Además, alegaron que el dinero intervenido procedía de la recaudación diaria en el local y de la venta ambulante de objetos en las calles de la ciudad.
La Policía registró todo el local ante la sospecha de que escondía más droga (sospechaban que habían recibido estos días un alijo) pero no la encontraron. Los dos arrestados prestaron declaración en la mañana del sábado ante el titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Ourense y quedaron en libertad con cargos.
