La Diputación aprobó ayer una modificación de crédito que, con un remanente de tesorería de 840.000 euros y la recuperación de más de un millón relacionado con la Finca Santamarina (antes en Urbaourense), le ha permitido repartir ayudas amás de 60 concellos y decenas de subvenciones nominativas (concedidas a criterio del presidente) a diversas entidades.
Pero el acuerdo, que salió adelante con los votos del grupo de gobierno, generó nuevas críticas de la oposición, que tachó de 'caciquil' la forma de reparto de subvenciones e inversiones . Socialistas y nacionalistas censuraron que los concellos del PP aglutinen buena parte del dinero destinado a obras y concluyeron que esta modificación es 'peor ca do seu predecesor (José Luis Baltar)' porque los municipios populares se llevan 'o 93,4% da modificación orzamentaria', dijo el socialista Gómez, que pidió también que, salvo casos excepcionales, las subvenciones se distribuyan por concurrencia competitiva.
Por su parte, el portavoz del gobierno provincial, Plácido Álvarez, señaló que 'as axudas responden ás peticións que fixeron os concellos nos ámbitos da súa autonomía municipal, que o presidente atendeu practicamente ó 100%'. Para defender las subvenciones nominativas, Álvarez citó textualmente al actual alcalde de Ourense, el socialista Agustín Fernández, que en un pleno municipal defendió también la validez de este tipo de ayudas.
La Diputación aprobó también -con la abstención del PSOE y los votos en contra del BNG- una modificación para reducir el endeudamiento neto. Mientras Plácido Álvarez presumía de que éste era 'do 116% en febreiro de 2012 e agora é do 84%', el nacionalista Leopoldo Rodríguez criticaba que se priorizase el pago a la banca frente a las inversiones y añadía que se 'van pagar pufos de anos atrás'.
PETICIÓN DE DIMISIÓN
El pleno, que se prolongó durante cuatro horas, sirvió también para que los diputados del PP vetasen la petición del PSOE de que el presidente, Manuel Baltar, dimita. La moción socialista, en la que el BNG se abstuvo, argumentaba que el presidente provincial debía cesar en su cargo por ser 'esclavo do seu pasado', al considerarlo 'beneficiado' por la contratación de 104 personas a raíz del congreso del PP de enero de 2010, que llevarán a juicio al expresidente, José Luis Baltar. Plácido Álvarez tachó de 'ocurrencia' la moción del PSOE presentada por urgencia y aseguró que los compromisarios del PP depositaron en urna sus votos secretos, argumentando que de los 1.212 compromisarios sólo seis fueron contratados, conminando a los socialistas a 'traballar pola provincia e non en contra das persoas, déixense de caralladiñas', ironizó.
El BNG, por su parte, se abstuvo al considerar que 'esta é unha forma de facer política' que se 'arranxa coa desaparición das deputacións, que ó longo destes anos convertéronse en máquinas clientelares', aseguró Leopoldo Rodríguez. Por último, Manuel Baltar tomó la palabra para contraatacar al PSOE citando al expresidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, que aseguró recientemente que al PSOE le falta carácter y liderazgo. Además, en tono irónico, felicitó a Gómez, del que dijo: 'Quero que siga facendoo así', además de recordar que, desde el congreso de 2010, 'houbo tres eleccións democráticas que deron os resultados que deron', por los reiterados triunfos del PP. Baltar votó en contra de la moción que pedía su cese, aunque los socialistas creen que debía haberse abstenido.
Por su parte, el portavoz del gobierno provincial, Plácido Álvarez, señaló que 'as axudas responden ás peticións que fixeron os concellos nos ámbitos da súa autonomía municipal, que o presidente atendeu practicamente ó 100%'. Para defender las subvenciones nominativas, Álvarez citó textualmente al actual alcalde de Ourense, el socialista Agustín Fernández, que en un pleno municipal defendió también la validez de este tipo de ayudas.
La Diputación aprobó también -con la abstención del PSOE y los votos en contra del BNG- una modificación para reducir el endeudamiento neto. Mientras Plácido Álvarez presumía de que éste era 'do 116% en febreiro de 2012 e agora é do 84%', el nacionalista Leopoldo Rodríguez criticaba que se priorizase el pago a la banca frente a las inversiones y añadía que se 'van pagar pufos de anos atrás'.
PETICIÓN DE DIMISIÓN
El pleno, que se prolongó durante cuatro horas, sirvió también para que los diputados del PP vetasen la petición del PSOE de que el presidente, Manuel Baltar, dimita. La moción socialista, en la que el BNG se abstuvo, argumentaba que el presidente provincial debía cesar en su cargo por ser 'esclavo do seu pasado', al considerarlo 'beneficiado' por la contratación de 104 personas a raíz del congreso del PP de enero de 2010, que llevarán a juicio al expresidente, José Luis Baltar. Plácido Álvarez tachó de 'ocurrencia' la moción del PSOE presentada por urgencia y aseguró que los compromisarios del PP depositaron en urna sus votos secretos, argumentando que de los 1.212 compromisarios sólo seis fueron contratados, conminando a los socialistas a 'traballar pola provincia e non en contra das persoas, déixense de caralladiñas', ironizó.
El BNG, por su parte, se abstuvo al considerar que 'esta é unha forma de facer política' que se 'arranxa coa desaparición das deputacións, que ó longo destes anos convertéronse en máquinas clientelares', aseguró Leopoldo Rodríguez. Por último, Manuel Baltar tomó la palabra para contraatacar al PSOE citando al expresidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, que aseguró recientemente que al PSOE le falta carácter y liderazgo. Además, en tono irónico, felicitó a Gómez, del que dijo: 'Quero que siga facendoo así', además de recordar que, desde el congreso de 2010, 'houbo tres eleccións democráticas que deron os resultados que deron', por los reiterados triunfos del PP. Baltar votó en contra de la moción que pedía su cese, aunque los socialistas creen que debía haberse abstenido.
