La emergencia cinegética declarada por la Xunta para reducir el censo de jabalíes tuvo en consideración el elevado número de accidentes de tráfico que están causando en los últimos años. En algún caso reciente, como ocurrió en Chantada en agosto, con dos víctimas mortales de 18 años.
Ourense se ha colado a nivel nacional como una de las cinco provincias, junto a Burgos, Soria, Teruel y Huesca, en las que los animales, tanto silvestres como domésticos, tienen una mayor afectación en la seguridad vial. 2022 cerró con cifras hasta entonces no rebasadas: 1.626 accidentes (el 51,3% del total de siniestros de todo tipo registrados).
Entre enero y el pasado 14 de septiembre, fueron notificados 577 percances automovilísticos por la irrupción de suidos en las carreteras ourensanas, el 61% del total de siniestros atribuidos a la fauna. Pero en este último año, las autoridades con competencias en Tráfico advierten de otra realidad no menos preocupante: las colisiones entre vehículos y corzos que se aproximan al asfalto en busca de comida. Y si durante el verano, los incendios forestales contribuyen a que invadan las carreteras, en otoño, un periodo especialmente peligroso debido a las batidas de caza.
Daños hasta 3000 euros
En lo que va de año, los corzos aparecen en 266 de los choques con animales, sobre todo en carreteras secundarias. Y aunque no provocaron víctimas, sí importantes daños en algunos casos, con reparaciones que implicaron desembolsos de hasta 3.000 euros por daños en las carrocerías de los coches. “Son golpes violentos y peligrosos por la envergadura del bicho”, aseguran fuentes de la Guardia Civil de Tráfico. Así, las reparaciones de los vehículos suelen ser dos veces más caras que las de un golpe normal, y a las gestiones, un 38% más lentas, según aseguran desde los talleres. Las partes del coche más afectadas son el parachoques delantero, la rejilla y el capó (39%), seguidos de los faros e intermitentes delanteros (22%), las aletas delanteras (14%), los bajos y el faldón delantero (10%), el radiador (4%) y la matrícula (3%).
La Dirección General de Tráfico, en estos casos, aconseja circular con suma precaución en zonas próximas a cotos de caza. En caso de accidente, recomienda frenar para llegar al choque con la menor velocidad posible y nunca dar volantazos o cambios de carril. Y siempre, añadir al seguro del vehículo la cobertura de “animales cinegéticos”.
En estos primeros ocho meses de 2023, se contabilizaron 952 accidentes por invasión de la fauna en las carreteras de la provincia. Aunque el jabalí y el corzo son los habituales en los siniestros con animales silvestres, también aparecen en los atestados 18 con zorros y 10 con tejones. Mientras, en el ámbito doméstico, las colisiones con animales ascienden a 56, la inmensa mayoría protagonizadas por perros (43).
