Los espectaculares trabajos que los operarios del Ministerio de Fomento realizan estos días en la N-120, y que mantiene cortada de forma íntegra la vía entre el kilómetro 558 y 565 por los desprendimientos a la altura del punto kilométrico 563, han cambiado por completo la fisonomía del entorno, en busca de fijar el talud de más de 50 metros y garantizar la seguridad de los conductores.
Fomento no se atreve a fijar una fecha de reapertura del principal vial que comunica la comarca de Valdeorras con la ciudad y aplaza sine die la finalización de las labores que realizan estos días.
Según informan fuentes ministeriales, se está trabajando intensamente en la zona –limpiando el talud, acondicionándolo…– y, paralelamente, se está estudiando con expertos en materia geotécnica las distintas soluciones al problema, ya que se trata de un talud de aproximadamente 50 metros.
"Ante todo, debemos salvaguardar la seguridad vial, por lo que actualmente no se puede dar una fecha de apertura", apuntan desde Fomento.
Así pues, y con el invierno a las puertas, nadie puede certificar cuándo volverá a estar abierta la N-120. Mientras, la vía alternativa –C-546– sigue preocupando a los conductores, debido a su estrechez en algunos puntos, que provoca sustos en la conducción.
Los transportistas piden al Gobierno que se aborde una "solución integral"
Los transportistas, uno de los colectivos más afectados por el corte, ya han solicitado una reunión con la Subdelegación del Gobierno, para abordar posibles alternativas –se celebrará esta mañana–. Actualmente se desvían, bien por Chantada, bien por la A-52 a través de A Gudiña, una de las rutas recomendadas por la Asociación Empresarial de Transporte de Mercancías (Apetamcor),ya que le consumo es semejante y el trazado mejor que ir por la variante de Chantada.
"Pedimos que axilicen o que poidan as obras e que se aborde unha solución integral, posto que os desprendementos son moi habituais na N-120", explica Alberto Vila, secretario de Apetamcor. Además, piden mejoras en otros tramos de la N-120, que están "en estado lamentable, con socavóns, fochancas...".
Mientras tanto, los usuarios habituales de la vía y vecinos de Valdeorras confían en que se pueda abrir al menos un carril para mejorar la fluidez.
