El vigilante del camposanto de As Caldas lo entregó hace más de un mes a la Policía Local
El bolso de la mujer que está desaparecida desde el pasado día 7 de abril, Belén Rodríguez Estévez (57 años), fue hallado al día siguiente de su falta en el cementerio de As Caldas (A Ponte). Un mujer lo encontró encima de uno de los varios grifos de agua que hay en el camposanto y se lo entregó al vigilante de las instalaciones. Este, a su vez, lo depositó en el departamento de objetos perdidos de la Policía Local, que intentó sin éxito en varias ocasiones comunicarse, vía telefónica, con la mujer (su desaparición no fue denunciada hasta el día 18) para que fuera a recogerlo. En el bolso tenía las llaves de casa, el mando de abrir la puerta del garaje, el DNI y tarjetas de crédito.
La Policía Nacional recuperó el bolso el pasado día 10 de mayo al percatarse los agentes de objetos perdidos, durante un chequeo mensual del material que tienen acumulado, de que el bolso pertenecía a la mujer que está desaparecida.
Ahora, el Cuerpo Nacional de Policía centra la investigación en el bolso con el objetivo de que pueda arrojar alguna luz sobre el paradero de Belén Rodríguez. Los agentes no descartaban ayer que la maleta fuese encontrada con posterioridad por otra persona fuera del cementerio y dejó sobre el grifo, en un lugar visible, ante la sospecha de que su dueña había visitado el cementerio y regresaría al percatarse de que la había perdido.
La Comisaría de Ourense hacía pública ayer la imagen del bolso con el objetivo de localizar a una primera persona que lo encontró, para que les indique el lugar exacto en que estaba por si pueden hallar alguna pista sobre la desaparición de la mujer.
Belén Rodríguez, según dio a conocer el cuerpo de seguridad, fue vista por última vez muy cerca del cementerio de As Caldas, en el exterior de la estación de autobuses. El día de su desaparición, un grupo de jóvenes estuvieron hablando con ella en esa zona y, según fuentes policiales, presentaba un estado de enajenación grave. Les dijo que regresa de las termas de Outariz.
La Policía Nacional, en colaboración con la Guardia Civil y la Policía Local, la buscó durante varios días del pasado mes de abril en el cauce del río Miño, Bemposta -residió en esta zona-, Trives -donde tiene una casa de turismo rural-, y en los montes de Xunqueira de Espadañedo, en los que solía hacer de vigía durante el verano para advertir de incendios forestales. Sospechan que la mujer tenía vínculos con la secta Ramtha.
La búsqueda no dio frutos durante este tiempo y los investigadores centran ahora las pesquisas en el bolso. Ayer mantenían abiertas todas las hipótesis.
