En el despacho del teniente Nogueiras en el edificio esquinado del destacamento de Tráfico, en la Comandancia de Santa Mariña, todo está alineado. Se diría, a priori, que es un maniático del orden, pero, según comenta más tarde, le gusta la precisión, la misma que reclama a la hora de coger un coche. La oficina es para él un lugar de paso porque hace kilómetros como el que más. Las fotos de las paredes, instantáneas de intervenciones comprometidas como los temporales de nieve, lo demuestran.
En 2023 hubo casi el doble de fallecidos en accidentes de tráfico -24 víctimas- con respecto a 2022 -13-. ¿A qué atribuye ese incremento?
Por múltiples factores y vemos causas concurrentes. Pese a las campañas preventivas y los controles, hay gente que sigue conduciendo bebida y drogada. Y aquí están desgraciadamente los resultados. Hubo cinco siniestros en los que se detectó la presencia de alcohol en el organismo y en otro más, drogas, según revelaron las analíticas del Imelga. En la memoria nacional de 2022 sobre hallazgos toxicológicos de víctimas de tráfico se recoge que, tras la pandemia, se vieron más casos de conductores fallecidos en los que aparecen psicofármacos incompatibles con la conducción, tal como ocurre con los ansiolíticos. Otro de los factores que se repite son las distracciones. Las manipulaciones de los smartphones sin manos libres, leer, enviar mensajes, el uso de navegadores u otros dispositivos electrónicos provocan graves desatenciones en la conducción. Vivimos en un mundo en el que todo va demasiado rápido… Y a muchos los llevas después a la morgue con nombre y apellidos.
¿Nos gusta pisar el acelerador?
La red viaria gallega, con muchos caminos locales, no permite circular a velocidades tan elevadas, algo que incluso llama la atención a los de fuera cuando llegan aquí, y ante una mínima desatención no hay margen para corregir la maniobra. Hubo varias salidas de vía con despeñamiento en 2023.
La edad media de las víctimas fue elevada. ¿Es un problema?
En Ourense, la población está muy envejecida, pero no quiero criminalizar a los conductores de edad avanzada. Habría que analizar caso por caso. Los psicotécnicos a la hora de realizar las pruebas de aptitud no tienen acceso al sistema IANUS del cliente, en donde aparece la información clínica de la persona y la medicación. El responsable del psicotécnico se fía de lo que se le dice y las pruebas que realiza. Habría que facilitar ese acceso a la medicación. Es un problema serio que requiere decisiones serias. Además, creo que las renovaciones no deberían ser tan sencillas en España. Hay cambios constantes en la legislación de Tráfico, con cambios de normas y espacios en los que se desarrolla la conducción. ¿Cuánta gente hay que no sabe entrar y salir de una rotonda? Muchísima. Además de las pruebas médicas debería exigirse un examen de pericia para testar las capacidades de conducción en el tráfico del siglo XXI, en las carreteras actuales y con los vehículos de ahora. La renovación del permiso debe ir más allá de mirar la tensión arterial y taparme un ojo.
El estado del firme de algunas vías -tramos de la A-52 o N-120- es un despropósito…
Las sufro a diario, pero en la Guardia Civil no somos responsables de que estén bacheadas y con campo de mejora. Las empresas de conservación hacen lo que pueden, pero a veces hay que emprender obras integrales. La A-52 se mejora por tramos, pero es necesario extender la intervención a todo el trazado, porque es una autovía de 1997 y el tráfico de vehículos pesados aumentó -el carril derecho está muy bacheado-. En cuanto a la N-120, no entiendo cómo aún algún ciclista se atreve a circular. Es muy peligrosa para ese colectivo. Además, el asfalto en Galicia es muy negro por el drenaje, lo que provoca oscuridad en las carreteras. La señalización horizontal necesita un constante mantenimiento. Y en la A-52, en cotas elevadas, la sal para las heladas y las cuchillas de las quitanieves producen un desgaste temprano de la superficie asfáltica. Nosotros hacemos informes cuando vemos algo que hay que mejorar.
Y para colmo los jabalíes que se pasean por las carreteras.
El despoblamiento del rural y la falta de depredadores naturales, entre otros factores, ha provocado una superpoblación de jabalíes, corzos y zorros. El día de Año Nuevo una piara de 20 jabalíes, en la OU-101 (Ourense a Maceda), junto al Tecnológico, provocó dos siniestros viales casi consecutivos. En España se calcula que hay 2,5 millones de jabalíes y pronto serán tres millones. También crean problemas de seguridad ciudadana porque están en los cascos urbanos y pueden ser animales peligrosos cuando se ven acorralados. Se precisa un control exhaustivo para este grave problema. Creo que hay que tomar medidas drásticas aunque tengan un coste político. ¿Queremos seguridad? Pues hay que tomar decisiones y no mirar a otro lado.
¿En ese balance de 2023 hubo víctimas inocentes y culpables?
Hay que diferenciar. Están los que han sido responsables del siniestro, que en ocasiones son multirreincidentes y persisten en la falta de respeto hacia las normas y sus congéneres, y finalmente se matan. Y están las víctimas involucradas en un siniestro de tráfico sin responsabilidad ninguna, aunque pagan las consecuencias de otros. La gente conduce como vive y el que vive al límite conduce así. A la persona que no se cuida y se excede en alcohol y drogas le importa muy poco el otro. Aquí siempre tenemos excusa para beber; cualquier evento que no se celebre con unos buenos vinos ya no es fiesta. Le puedo decir claramente que una parte muy importante de la población consume habitualmente drogas, sobre todo cannabis. Hago los controles y por eso lo sé. Conducir es una actividad peligrosa que genera muertos y eso no podemos olvidarlo.
¿El estado de los vehículos deja que desear?
Estamos viendo mucha falta de mantenimiento desde la pandemia. Se apuran las ruedas al máximo y la preocupación solo surge cuando hay que pasar la ITV. Tenemos mucho coche de segunda mano y un parque de vehículos envejecido.
¿Qué le provoca urticaria?
Hay grupos de WhatsApp con mil personas para alertar dónde están los controles. ¿Usted concibe un grupo que alertase a los agresores sexuales o maltratadores dónde está la policía para actuar impunemente? Sería impensable, pero me pregunto por qué no le damos a la seguridad vial la importancia que merece. No todos son accidentes de tráfico -hechos fortuitos-, hay siniestros penalmente relevantes con muertes y lesiones. Y no todo es "jajajá". Esos grupos no tienen finalidad social. ¿No será que alguno de los administradores de esos grupos mueve mercancía y solo pretende tener ojeadores?
Hay 800 conductores potencialmente peligrosos por la pérdida de todos los puntos, por la privación del derecho a conducir por sentencia o pérdida de facultades. ¿Cómo es, en su opinión, el reincidente?
Un varón temerario, agresivo, insolidario y egocéntrico. Conduce despreciando las normas, exhibiendo una falsa masculinidad y equivocada sensación de impunidad. La tolerancia cero con ellos es imprescindible y para ello hay que utilizar todas las herramientas del estado de derecho: educación en seguridad vial, la vigilancia de los reincidentes, el reconocimiento médico y hasta el tratamiento psicológico de los más recalcitrantes.
