La Audiencia Provincial acogió ayer el segundo juicio de la semana por abusos sexuales a una menor de edad. En este caso, el acusado es abuelo y la víctima una niña que tenía seis años cuando presuntamente ocurrieron los hechos. Estos transcurrieron entre 2017 y 2018. El escrito fiscal recoge que el imputado, Felisindo R.P., se hacía cargo con frecuencia de su nieta en el domicilio familiar. También la cuidaba algunos fines de semana en su propia casa, donde la niña se quedaba a dormir.
Según la acusación, desde que la menor tenía seis años, el acusado la inducía a tocarle los genitales en reiteradas ocasiones, llegando a cogerle él la mano si ella se negaba. Al mismo tiempo, él también le realizaba tocamientos a la niña.
Estos abusos, según el ministerio fiscal, ocurrían cuando se encontraban solos en la habitación de ella. Momento en el que, supuestamente, Felisindo R.P. iba a acostar y dar las buenas noches a la niña.
Delito
Los hechos son constitutivos de un delito de abusos sexuales continuados a una menor. Por ello, la acusación pide cinco años y seis meses de prisión para el abuelo de la víctima. También establece una orden de alejamiento a menos de 100 metros y una responsabilidad civil de 6.000 euros por los daños morales ocasionados.
Con todo, aunque ayer todas las partes acudieron a la Audiencia, hubo que suspender el juicio. La defensa presentó una nueva prueba y se encontró con un error en el escrito fiscal. Esto fue así porque el nombre de la víctima fue confundido por otro en uno de los párrafos.
