Libertad provisional para el presunto autor del tiroteo en Maceda, con una orden de alejamiento

Guardia Civil.
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El presunto autor del tiroteo de Maceda ha quedado en libertad, y con una orden de alejamiento que le prohíbe acercarse y comunicarse con David Rodríguez "Choupi" mientras se investigan los delitos

Inocente hasta que se demuestre lo contrario. Tras tres largas horas, el juez de guardia Leonardo Álvarez levantó ayer el secreto de sumario y decretó la libertad provisional para el detenido como presunto tiroteador de Maceda porque no tiene indicios suficientes que permitan acreditar, en estos momentos de la instrucción, que fue el autor de los tres disparos que hirieron de gravedad a David Rodríguez "Choupi" el pasado 2 de noviembre. “La víctima se contradijo. Primero declaró ante la Guardia Civil que no sabía quién le disparó y, posteriormente, también ante los agentes, dio el nombre del sospechoso”, explicó el magistrado para motivar esta decisión difícil que podría provocar alarma social.

El detenido el pasado Día de Reyes, 6 de enero, un varón de unos 40 años y vecino de Pereiro de Aguiar, llegó ayer puntual, a las doce del mediodía, a los Juzgados de Ourense, a bordo de un coche patrulla de la Guardia Civil.  El investigado por los delitos de homicidio o asesinato en grado de tentativa, o robo con fuerza en grado de tentativa se acogió a su derecho a no declarar, según aseguró su abogado, Arturo González. Pese a que el fiscal solicitó la prisión provisional, el juez se negó a ello al considerar que “no hay pruebas suficientes”. Por ello, decretó la libertad provisional, como medida cautelar, y una orden de alejamiento de la víctima, que según González, todavía no ha prestado declaración en sede judicial. 

El juez, que no tiene clara la autoría de los hechos, decidió no adoptar una medida preventiva tan gravosa como la prisión provisional, teniendo en cuenta que no hay riesgo de fuga, dado que el investigado tiene arraigo familiar, trabajo y una familia que depende económicamente de él; no puede destruir pruebas, ya que la fase de instrucción está concluida; y no hay peligrosidad para la víctima, porque esta ya lo ha identificado, según las fuentes consultadas.

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