El confinamiento forzoso ha provocado que los cumpleaños de muchos ourensanos se celebren sin salir de casa, con felicitaciones telemáticas y la promesa de juntarse cuando todo pase. Pero aunque la crisis del coronavirus impida festejos masivos, sí permite nuevas fórmulas acorde a las medidas de prevención. Las fuerzas de seguridad de la provincia se ocupan estos días, además de vigilar y cubrir las necesidades de los más vulnerables, de animar a pie de calle los cumpleaños de los vecinos, sobre todo, de los más pequeños. Con música desde los vehículos y desde la acera, agentes de la Policía Local y voluntarios de Protección Civil participan en las improvisadas fiestas, que alegran tanto a los niños como a los adultos.
Los integrantes de Protección Civil de Allariz fueron los primeros en sumarse a esta iniciativa, que también se lleva a cabo en otras localidades de Galicia y de España. "Avisounos un veciño de que era o aniversario dunha nena, e nada, pedímoslle que nos dixera cal era o seu balcón, falamos cos pais, e achegámonos ás oito, nos aplausos", explica Miguel Ángel López, coordinador del equipo alaricano. "Foi un pouco de imprevisto, e a música non nos funcionou, pero foi máis bonito así porque todos os veciños se puxeron a cantar con nós", asegura. La pequeña cumpleañera recibió la sorpresa con alegría, que se contagió al resto de la calle: "O certo é que nestes días fan falla cousas deste estilo, e para os nenos é moi importante, tamén os sacas da rutina que teñen estes días".
Desde Protección Civil Barbadás, Daniel Rey también destaca la necesidad de alegrar el día a día de los vecinos. "Es evidente que todos lo necesitamos, cumple también una función social", apunta. En Barbadás, el equipo también ha dado sorpresas a varios niños en edad escolar, en la medida de lo posible. "Lo hemos hecho por iniciativa personal, les llevamos algún caramelo sin alérgenos y alguna tarjeta de felicitación. También a una compañera que está confinada le hemos ido a celebrar el cumpleaños", explica. Los voluntarios participan en los aplausos de la tarde desde los vehículos, y aprovechan ese momento para animar al vecindario. "A la gente le hace ilusión, y este tipo de iniciativas nos ayudan a todos", apunta.
En O Carballiño, el municipio anunció esta semana que celebrará los cumpleaños de todos los niños de entre 1 y 11 años, y ayer por la mañana el equipo salía a las calles para felicitar a cuatro pequeños. "Algo hai que inventar para animar aos rapaces, que non o pasan nada ben confinados nos pisos. É algo necesario", asegura el alcalde de la localidad, Francisco Fumega.
En Ourense, la Policía Local le cantaba el cumpleaños feliz la pasada semana a una vecina de corta edad de la avenida de La Habana, que se mostraba emocionada desde su ventana.
En O Barco, también los agentes de la Policía Local animaron el 18 aniversario de una joven.
“Un ratiño de parola"
Los voluntarios de Protección Civil también se encargan estos días de visitar a los más mayores, a los que no solo les llevan alimentos o medicamentos, sino también conversación. "Cumplindo en todo momento o protocolo, pero falamos un rato para que tamén pensen noutra cousa", comenta Miguel Ángel López. "Hay muchos mayores solos que necesitan hablar un poco", añade Rey.