Los especialistas realizan más de 200 procedimentos anuales de extracción de cuerpos extraños de la nariz, oido o garganta, una labor que convirtió a San Blas en su patrón. Hoy se conmemora el día de la otorrinolaringología, coincidiendo con la celebración de San Blas, médico y obispo armenio del siglo IV al que se le atribuye la curación de un niño que se estaba ahogando con una espina de pescado. Más 1700 años después, los especialistas de oído, nariz y garganta continúan reivindicando esta labor “imprescindible” que muchas veces salva la vidas, y que es mucho más frecuente del que se podría pensar.
En el Servicio de OTRL se atienden una media de 15 casos mensuales de extracción de cuerpos estraños, sin contar los que se atienden en primaria o urgencias. Celia Lendoiro, jefa del servicio, explica que “en adultos los más frecuentes son las espinas y huesos, mientras que en niños suelen ser cuerpos extraños nasales y en los oídos”.
En este sentido, Lendoiro advierte que “los más peligrosos en niños son los atragantamientos que puedan obstruir la vía aérea”.