Esto se debe fundamentalmente a las grandes centrales hidráulicas realizados durante el franquismo, ya que el desarrollo de otras técnicas de producción energética renovables es escaso, pero ofrece importantes oportunidades de cara al futuro. Así lo recoge un estudio realizado por la Cámara de Comercio sobre la situación de este sector, realizado con el fin de indagar en las posibilidades de negocio para los próximos años.
En concreto, la producción hidráulica representa el 85% de la energía que tiene su origen en la provincia, mientras que el resto proviene de la eólica, biomasa y fotovoltaica. De hecho, la producción generada por las centrales hidráulicas ourensanas en 2006 (último ejercicio para el que están disponibles los datos con desglose provincial) representó casi el 15% del total de la electricidad de procedencia hidráulica generada en España.
En el resto de Galicia, el sector hidráulico tiene un peso muy inferior al de Ourense, si bien el sector eólico se sitúa como el más importante en generación procedente de fuentes renovables en A Coruña o Pontevedra. No obstante, en la provincia ourensana, la potencia eólica instalada se encuentra muy por debajo. Las centrales de cogeneración (a partir de biomasa o residuos) y fotovoltaicas completan el panorama de producción de energía, pero su peso es escaso.
En relación con otros sistemas de producción, Ourense no cuenta con plantas de refino, producción de biocombustibles, centros de ciclo combinado o centrales térmicas. En el resto de Galicia, particularmente en A Coruña, sí existen centrales de este tipo, lo que la sitúa en primer lugar en el cómputo general de producción energética, incluyendo también las fuentes no renovables.
POTENCIAL
El informe de la Cámara constata que sectores como el eólico, el biogás o la biomasa cuentan con un gran potencial en la provincia, así como el sector solar o el geotérmico. De hecho, el estudio muestra que en 2020 podrían generarse cerca de 3.000 puestos de trabajo directos e indirectos, gracias a inversiones de 740 millones de euros. De hecho, el objetivo marcado por el Gobierno gallego es que, a finales de la presente década, un 95% de la energía eléctrica producida en Galicia proceda de las renovables.
El estudio cameral sostiene que este ámbito presenta grandes posibilidades para generar negocio, pero precisa emprendedores con gran capacidad de innovación y elevada cualificación. Además de la producción, existen otros servicios que también se desarrollarán, como los vinculados a la autoproducción y la eficiencia energética (según establecen las nuevas normativas de construcción de edificios). La producción o desarrollo de tecnologías eólicas, solares o geotérmicas, así como en los ámbitos de biomasa o biogás, además de los cultivos energéticos, constituyen otras áreas con potencial de creación de empleo.
