Ourense logra un pequeño respiro al atenuar contagios y dar 21 altas más

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Los casos activos crecen menos que en los días previos, registrándose dos muertes en el CHUO y ninguna en geriátricos

El crecimiento de contagios en Ourense vuelve a estar, cinco días después, por debajo de la media de Galicia tras evolucionar los casos activos de 1.154 a 1.166, una docena más que supone un aumento de algo más del 1% en una jornada en la que hay que destacar que las altas de pacientes se aproximan ya a las 200, tras anotar 21 más y situarse en 187, entre las que se incluyen dos de usuarios del centro de discapacidad Santa Cruz de Ourense.

Con la incidencia de la enfermedad más alta de Galicia, Ourense espera estos días a que los sanitarios completen la "fotografía real" de los más de 100 geriátricos repartidos por la geografía ourensana, dado que el Sergas ha intensificado en los últimos días las pruebas en estos equipamientos, cuyos resultados se irán desvelando puntualmente y que, por ejemplo, ya dejaban buenas noticias en casos como el de la residencia do Mosteiro de Ramirás, donde más de un centenar de un personas dieron negativo en la prueba del coronavirus realizada el pasado jueves, como informó la alcaldesa del municipio, Isabel Gil, en un comunicado.


Estabilidad


Así, por primera vez en varios días la Xunta no tenía que dar cuenta en su balance diario de ningún fallecido más en los centros de la tercera edad ourensanos, en los que la situación deja una cifra de contagiados muy similar a la anunciada durante el domingo, con 447 personas infectadas, de las que 323 son usuarios y 124 trabajadores. Aparecen en EL listado dos geriátricos más –DomusVi Ourense y residencia Monte Barrio (Riós)–, lo que supone que sean ya 21 las residencias afectadas en Ourense, con Nuestra Señora de la Esperanza (136), Nuestra Señora de Fátima de O Barco (79) o Divino Maestro (53) entre las más afectadas, ya que si bien siguen contabilizándose a los usuarios de San Carlos de Celanova, 18 de ellos regresaban a las instalaciones el domingo tras ser curados en la residencia integrada de Os Milagros, un traslado de nuevo cuestionado por el BNG de Celanova, que ve riesgo para el personal del centro.

Mientras, el alta de los dos usuarios del centro de discapacidad de  Santa Cruz sitúa la incidencia del virus en estos equipamientos sociosanitarios en cuatro centros ourensanos. Aixiña tiene cinco infectados y Santa Cruz, Santa María y Monterrei uno cada uno.

El PSdeG insistía ayer en que la Xunta debe tomar ya medidas en los centros sociosanitarios, pidiendo "información detallada" por cada centro.


Consecuencias


La evolución de la pandemia dejaba ayer una situación algo más favorable en el Complexo Hospitalario Universitario de Ourense, donde los pacientes que requerían hospitalización en planta eran 131, 18 menos que un día atrás. Ese descenso permite al área sanitaria ourensana situarse en un total de 157 personas ingresadas fuera de la UCI, con seis de ellos en Verín, 19 en el hospital de Valdeorras y 2 en Cosaga. A todos ellos hay que sumar los 22 pacientes que están en la UCI, todos con "pronóstico grave", explican desde el Sergas.

Mientras, crece la lista de fallecidos hasta 78, registrándose dos muertes de dos pacientes de 87 y 70 años que estaban ingresados en el CHUO. Siete muertes más en el resto de áreas sanitarias de Galicia situaban la cifra global de la pandemia del coronavirus en 372, lo que supone el menor aumento de defunciones de los últimos días.


Limpieza


Las distintas administraciones continúan poniendo medios para contener el coronavirus, especialmente en el entorno de las residencias. Así, si efectivos del ejército desinfectaban en la tarde del domingo los centros de Ribadavia y Carballiño, ayer le tocaba al centro penitenciario de Pereiro de Aguiar. Mientras, bomberos del parque de A Rúa, perteneciente al Consorcio Provincial, trabajaban en el entorno de la residencia Nuestra Señora de Fátima de O Barco, intervenida por la Xunta ante las deficiencias en su gestión.

Nueva caída de los pacientes que precisan hospitalización, mientras los casos activos aumentan hasta los 1.166, con 12 más

Los efectivos encargados de limpiar y desinfectar centros residenciales y otros equipamientos son algunos de los trabajadores considerados de servicios esenciales, a los que ayer se sumaron en el tajo muchos que durante las dos últimas semanas habían estado parados por la ampliación del estado de alarma, como por ejemplo la construcción, al reactivarse obras públicas como la del enlace entre la A-52 y el Polígono de San Cibrao, precisamente uno de los centros neurálgicos de la actividad laboral ourensana, en la que más de la mitad de las empresas asentadas tenía ayer actividad.

Con el objetivo de dotar a los trabajadores de material de protección, Policía Nacional y Guardia Civil distribuyeron ayer mascarillas entre la población en paradas de transporte público o zonas industriales, una imagen que se repetirá a lo largo de la mañana de hoy. A Ourense han llegado 68.000 mascarillas enviadas por el Gobierno central.

Por otro lado, el Juzgado de lo Social número 3 de Ourense rechazaba la paralización del servicio de ayuda a domicilio de Ourense solicitada por CC OO, que aseguraba que los trabajadores no tenían material de protección. La jueza entiende que sí se están proporcionando.


Impacto


Las consecuencias en materia laboral y económica son, además de las sanitarias, las principales preocupaciones de las distintas administraciones, que tratan de poner instrumentos a disposición de ciudadanos y empresarios para que el golpe de esta pandemia sea el menor posible. En ello está, por ejemplo, la Diputación, que cuenta ya con una aproximación al impacto potencial en la provincia elaborada por el Observatorio Económico Ourensán, reflejando que la situación podría llegar a afectar a más del 65% de autónomos de la provincia y a la mitad de los trabajadores. En este sentido, la Xunta actualizaba ayer las solicitudes de regulación temporal de empleo (ERTE), que tienen en vilo a cerca de 16.350 trabajadores de Ourense.

Además de esto, el impacto también será económico en concellos como el de Allariz, ya que ayer se anunciaba la suspensión de la Festa do Boi que tenía previsto celebrarse entre el 6 y el 14 de junio. A finales de ese mes deberían tener también lugar las Fiestas de Ourense, pero ayer el edil de Cultura ya anunciaba que el gobierno municipal trabaja en "un formato adaptado á nova realidade", teniendo en cuenta en todo momento las recomendaciones de seguridad.

El deporte también sigue golpeado y Castrelo de Miño tendrá que esperar a 2022 para disfrutar de la "Coupe de la Jeunesse", una de las pruebas más importantes del calendario europeo del remo.


Actuaciones


En el marco de las restricciones existentes durante estas semanas está la de la movilidad, encargándose los distintos cuerpos policiales de vigilar los comportamientos ciudadanos. Según desveló ayer la Policía Local de Ourense,sus agentes tramitaron la semana pasada 193 propuestas de sanción, aumentando la identificación de personas a 1.361. Desde que se decretó el estado de alarma, se acumulan 709 expedientes sancionadores y nueve detenidos. 

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