El número de positivos de coronavirus en la provincia de Ourense sigue aumentando a un ritmo exponencial, tal y como adelantaban estos días las autoridades sanitarias. A última hora de la tarde de este viernes eran 14 los casos confirmados, de los que ninguno está hospitalizado, tal y como aseguran fuentes oficiales. Según pudo saber este periódico, los contagiados en el colegio Salesianos siguen aumentando, y ya son al menos tres los docentes afectados por COVID-19.
Los focos contemplados por la Consellería de Sanidade se incrementan, ya que también se tiene en cuenta la academia a la que acudían la profesora de Salesianos y la de Cardenal Cisneros, y donde previsiblemente la primera contagió a la segunda. El centro de estudios, que este viernes por la mañana todavía permanecía abierto, cesó su actividad por la tarde de forma preventiva.
Más cierres
Mientras el número de afectados continúa creciendo, poco a poco son más los centros y los locales que echan el cierre para evitar posibles contagios. Edificios de atención al público limitaban este viernes el acceso de la población, así como centros deportivos, culturales y de ocio –muchos cerraban ya durante la tarde–. Los centros educativos, cerrados a partir del próximo lunes, se mantenían ayer abiertos todavía, aunque la mayoría de los alumnos ya no acudió a clase tras las recomendaciones de los profesionales.
Estos días, el profesorado afronta la tarea de adaptar los contenidos a las plataformas online, mientras los estudiantes de segundo de Bachillerato muestran su preocupación ante la proximidad de la ABAU. En el IES Otero Pedrayo, los docentes mantuvieron ayer un claustro extraordinario para abordar el nuevo formato de enseñanza. El director, Daniel Lorenzo, pide "calma" y asegura que en estos momentos "hai que facer o que nos digan as autoridades, non podemos caer no alarmismo". En las guarderías, por su parte, el número de niños también disminuía notablemente en la jornada de este viernes, aunque algunos padres se veían obligados a llevar a sus hijos ante la falta de otras alternativas.
A partir del lunes, la mayoría de los docentes tendrán que acudir a su centro de trabajo con normalidad, aunque la situación podría cambiar con el paso de los días. "Nos han dicho que esto no son unas vacaciones, pero es cierto que si no hay niños a los que atender, nosotros poco podemos hacer aquí", apuntan desde una guardería pública de la ciudad. "No entiendo cómo nos hacen ir a un centro sin alumnos, ¿es que nosotros no nos podemos contagiar? ", asegura un docente ourensano.
Asistencia sanitaria
La incidencia del COVID-19 provoca días difíciles en los centros sanitarios de la provincia. Las autoridades piden a los pacientes –sobre todo, gente mayor–, que eviten en la medida de lo posible las visitas a los centros, y que utilicen la atención telefónica con sus médicos de cabecera. "No podemos llamar al 061 por una febrícula, tenemos que mantener la calma y dejar espacio en los teléfonos de emergencia a los casos más graves, como pueden ser infartos o ictus", recuerda Javier de la Fuente, presidente de la Sociedade Galega de Medicina Interna.
En el CHUO, por el momento, la situación está bajo control, aunque el equipo se prepara para el aumento exponencial de casos. Mientras, ciertos sanitarios de guardia se quejan del cambio de comedor del hospital, que "no cumple" ciertas medidas de seguridad respecto al coronavirus.
Misas
Durante la mañana de ayer, ciertos municipios de la provincia pedían a su población evitar acudir a los templos religiosos como medida de prevención ante el riesgo de contagio. El Concello de Taboadela llamaba a la colaboración de los vecinos para reducir los posibles contagios de coronavirus.
A última hora de la tarde de ayer, el Obispado de Ourense anunciaba que las misas, así como cualquier tipo de celebración eclesiástica, se cancelan por el estado de emergencia sanitaria, tal como acordaron en la reunión mantenida por los obispos de la provincia eclesiástica de Santiago de Compostela. La comunidad religiosa llama a la tranquilidad, así como a la "responsabilidad por el bien de la salud propia y del prójimo". Además, recuerdan que las misas se pueden seguir vía radio o televisión.
Mayores
El contagio de coronavirus preocupa, de forma especial, en la población de avanzada edad de la provincia. Las autoridades sanitarias recomiendan a las personas mayores, así como a los que tengan algún tipo de dolencia crónica previa, mantenerse aislados en sus domicilios en la medida de lo posible.
Además, reiteran la importancia, para los más jóvenes, de limitar al máximo el contacto con las personas de más edad.
